Ocupan bocinas y vehículos en negocios ruidosos en Santo Domingo Este
EL OPERATIVO ANTI RUIDO DEL AYUNTAMIENTO Y LA PROCURADURÍA CONTINUARÁ EN LAS PRÓXIMAS SEMANAS
El Ayuntamiento de Santo Domingo Este y la Procuraduría de Medio Ambiente ejecutaron este fin de semana un operativo especial de intervención y sanción de negocios recreativos que de manera regular violentan las normas antirruido, ocupan espacios públicos y afectan los derechos de cientos de familias de la autopista de San Isidro, Mendoza, la avenida Venezuela, Alma Rosa y la avenida España.
En coordinación con la Procuraduría de Medio Ambiente, los equipos de las direcciones de Espacios Públicos y Seguridad del Ayuntamiento intervinieron en 11 negocios, donde fueron apresadas dos personas, retenido un vehículo y se incautaron más de una decena de bocinas, bajos, sillas, hookahs, y kitipós.
Las autoridades explicaron que el operativo antirruido busca dar respuesta a las numerosas denuncias que los munícipes presentan cada semana contra negocios y personas “inconscientes” que colocan sus equipos de sonido al más alto nivel de volumen, afectando la paz y el derecho al descanso de la ciudadanía.
El de este fin semana, aseguran, es el primero de una serie de operativos dirigidos a proteger los derechos de los y las munícipes cansados de los altos niveles de ruido impuestos por algunos negocios y particulares.
“Toda persona tiene derecho a recrearse en libertad y a disfrutar de la mejor forma que le parezca. Pero el derecho a violentar la paz y la salud de los demás no existe. Por eso aumentaremos la presencia en este municipio hasta reducir al mínimo la contaminación sónica que tanta intranquilidad genera en las familias y en la gente que desea y merece descansar”, expresó el magistrado Robert Rodríguez, procurador de Medio Ambiente.
Según la Ley General de Medio Ambiente (64-00), la contaminación sónica o contaminación por ruido está prohibida, y debe ser sancionada por las autoridades una vez se confirme.
El ruido, recuerdan las autoridades, afecta la salud de las personas y tiene efectos severos en el sueño, el descanso, la concentración y la convivencia pacífica.