REPORTE DE INVESTIGACIÓN
El “Teteo” sigue siendo un asiduo problema del toque de queda
Si algo se ha demostrado con la medida del toque de queda para frenar los contagios de coronavirus, es que no merma los ánimos de la gente para salir a hacer fiestas y agruparse hasta altas horas de la noche.
Los últimos días han demostrado que ni con lluvias se para el festejo. Durante la semana y días anteriores son múltiples los videos que se han hecho populares de los “teteos”.
El pasado domingo en el Distrito Nacional, ciudadanos salieron a las calles de la ciudad a celebrar a pesar de que el toque de queda, y otras restricciones, prohibiera este comportamiento.
Sin embargo, esto no fue algo exclusivo del fin de semana anterior, sino que es una conducta que se ha repetido desde el principio de la pandemia, con personas quebrantando los protocolos sanitario siendo una práctica casi diaria.
Bailan todo tipo de música: urbana, reguetón, dembow, merengue y bachata. Pero el protagonista de estos “juntes” es uno solo: las bebidas alcohólicas. Y esto se evidencia por los restos que dejan los festejos, con decenas de botellas acumuladas en las esquinas de localidades en todo el territorio nacional.
Clandestino Similarmente existe la errónea percepción de que solo en las comunidades populosas del país es donde se quebranta el toque de queda en nombre de la diversión, sino que también lo han hecho los ciudadanos más pudientes de República Dominicana.
Así lo han constatado audiovisuales que presentan bodas costosas y fiestas de lujos, donde los invitados rompen protocolos sanitarios con la misma impunidad que ocurre en las demarcaciones más pobres.
Decreto El 7 de junio el presidente Luis Abinader emitió el decreto 364-21, extendiendo una semana más el actual horario del toque de queda, que cuenta con dos variantes de acuerdo al nivel de contagio de la provincia en cuestión.
De un lado están las que tienen un alto índice como el Gran Santo Domingo, Azua, Bahoruco, Barahona, Dajabón, Elías Piña, El Seibo, Hato Mayor, Hermanas Mirabal, Independencia, La Romana, María Trinidad Sánchez, Monseñor Nouel, Monte Cristi, Monte Plata, Pedernales, Peravia, San Cristóbal, San José de Ocoa, San Juan, San Pedro de Macorís, Sánchez Ramírez, Santiago Rodríguez y Valverde.
En estas demarcaciones el toque empezará a las 6:00 de la tarde a 5:00 de la madrugada, y los sábados y domingos desde las 3:00 de la tarde hasta las 5:00 de la mañana.
Para las demás provincias el horario será de 10:00 de la noche a las 5:00 de la madrugada, entre lunes a viernes, y los sábados y domingos será desde las 9:00 de la noche hasta las 5:00 de la madrugada.
Además, continúa la prohibición del expendio de bebidas alcohólicas, para ser consumidas en lugares públicos y privados de uso público desde las 3:00 de la tarde hasta las 5:00 de la madrugada.
A estos horarios se le agregan tres horas de gracia, para permitirles a los ciudadanos retornar a sus hogares.
Estos lugares, así como los destinados al consumo de alimentos, solo pueden recibir el 50 % de su capacidad en cumplimiento con los protocolos sanitarios vigentes.
Igualmente, espacios abiertos como parques y malecones solo serán utilizados para actividades que no impliquen aglomeración.
SEPA MÁS
Recorrido
El pasado fin de semana un equipo de reporteros del Listín Diario realizó un recorrido por sectores del Distrito Nacional como Cristo Rey, Ensanche La Fe, Villa Consuelo, Guachupita, Los Guandules, Villas Agrícolas, Villa Francisca, Pantoja y Capotillo.
La lluvia fue constante en esos días, algo que ayudó a palear el “teteo”, pero no lo erradicó del todo.
El pasado sábado, tras comenzar el toque de queda, algunos ciudadanos permanecían en las calles tomando bebidas alcohólicas o jugando dominó, así como niños recreándose, sin temor a multas o amonestaciones.
Hombres y mujeres de todas las edades se reunían en aceras de sectores de la capital con botellas y vasos de alcohol en mano, mientras que los más jóvenes aprovechaban el poco tránsito para jugar béisbol y baloncesto.
Y aunque los comercios de las principales vías estaban cerrados, el comercio informal parecía estar exento de las medidas, con salones de belleza en salas de casas, barberías en galerías, vendedores ambulantes, coqueros, fruteros y vendedores de víveres continuando sus negocios, sin importar la hora.
Una breve llovizna puso fin al día para muchos de los locales que aún se encontraban fuera de sus casas, a menos de 40 minutos de que se acaben las tres horas de gracia de libre tránsito.
Al día siguiente la lluvia fue más intensa, llevando a la mayoría de negocios de la zona estaban completamente cerrados, mientras en otros los empleados se encontraban en proceso de hacer lo mismo, aunque no fue así en todos los casos.