Tres causales: los partidos políticos se “tambalean” frente al aborto
Han pasado 24 años desde que la interrupción del embarazo bajo las tres causales empezó a formar parte de las discusiones del Congreso Nacional, desencadenando un constante “tira y afloja” entre partidos políticos que a lo largo de los años han “tambaleado” en sus posturas con respecto al polémico tema.
La inclusión de la interrupción del embarazo bajo tres circunstancias excepcionales, en un Código Penal que tiene 177 años de haberse promulgado, ha paralizado la “urgente” modificación del principal instrumento en materia punible que tiene el país.
Los años pasan y es como el “cuento de nunca acabar”: el Código no termina de reformarse.
La historia ha vuelto a repetirse desde comienzos de este año. Por un lado estaban los “pro-elección”, confiados en las promesas de campaña presidencial y plan de Gobierno de Luis Abinader, y por otro los “pro-vida”, apoyados en el derecho a la vida establecido en el artículo 37 de la Constitución dominicana y preceptos religiosos.
Precisamente el Partido Revolucionario Moderno (PRM), al cual pertenece el mandatario, es el que controla tanto el Poder Ejecutivo como el Poder Legislativo y por tanto, de cierta forma, tiene en sus manos el destino de las causales dentro del Código.
En diciembre de 2014, cuando aspiraba a la presidencia, Abinader “fijó su posición” con respecto al debate generado por las dos observaciones que le había hecho el expresidente Danilo Medina al proyecto de ley del Código Penal.
Medina solicitó una modificación en los artículos referentes a la penalización del aborto en todos los sentidos, y por primera vez propuso la inclusión de la legalización de la interrupción del embarazo bajo tres causales cuando la vida o la salud de la mujer se encuentra en peligro, cuando el feto es incompatible con la vida extrauterina o cuando el embarazo es producto de una violación o del incesto son las “tres razones excepcionales” que continúan detenidas en el Congreso.
Las promesas de Abinader
En medio de su campaña por la presidencia y ante un pueblo expectante por el controversial tema del aborto, Abinader resaltó que a pesar de pertenecer a la religión católica y oponerse tajantemente al aborto libre, sí apoyaba las causales para la interrupción del embarazo.
“Aunque siento profundo respeto y reconozco las genuinas motivaciones que tiene la Iglesia cristiana para reafirmar su posición tradicional sobre el tema, estoy convencido de que estamos frente a un grave problema de salud pública que afecta a las mujeres más pobres del país y que por lo tanto no se debe abordar exclusivamente desde una perspectiva religiosa”, expresó en aquella ocasión.
Abinader advirtió que la legislación actual que prohíbe la interrupción del embarazo bajo cualquier circunstancia “no ha tenido ninguna efectividad para frenar las prácticas clandestinas bajo condiciones de insalubridad que son comunes en el país”.
Posteriormente, en el 2017, el PRM envió una carta a sus legisladores en la que concluyeron, luego de una “larga discusión sobre el tema”, estar a favor de la despenalización del aborto en tres causales y resaltó que la decisión fue tomada en los organismos partidarios.
Luego, Abinader participó en el Desayuno del LISTÍN donde reiteró nuevamente su postura ante las causales y señaló que “esa ha sido la posición oficial del partido”.
“Nuestro partido tiene una posición en cuanto a las tres causales. Nosotros pensamos que debemos apoyarlas”, recalcó.
Llegaron las elecciones presidenciales y Abinader ganó, de modo que surgieron más expectativas de cara al tema que divide a la sociedad dominicana y a las bancadas de los partidos políticos.
En su programa de Gobierno, el mandatario reconoció al aborto como una “causa de violencia” y una de las principales problemáticas que caracterizan la situación de las mujeres; sin embargo, no se ofrecía una solución directa sobre la misma.
El plan propone que como forma de “revertir las situaciones que afectan a las mujeres” se deben implementar “políticas para el empoderamiento de las mujeres y el ejercicio de su autonomía económica, física y de participación social y política”.
“Es mi posición personal”
Pasaron los meses, el debate en torno a la despenalización del aborto se intensificó y decenas de mujeres comenzaron a acampar frente al Palacio Nacional en protesta de la legalización de la aborto en las causales.
El pasado 18 de marzo Abinader le dio la vuelta a su discurso y manifestó que la posición que había tomado hace varios años acerca de las tres causales era “personal”.
El presidente señaló que esperará la decisión que tome el Congreso Nacional con respecto al proyecto de Ley e insistió en que “todo el mundo conoce cuál es su posición personal sobre el tema”.
“Este es un tema donde yo tengo que respetar la opinión de cada uno de los diputados, este no es un tema donde nosotros podemos tomar una línea. La posición que yo expliqué sobre las tres causales es mi posición personal (…) yo tampoco puedo imponerles esa posición a diputados que tienen desde el punto de vista religioso otro tipo de pensamiento e idea”, expresó.
En respuesta, los grupos “proelección” avivaron las protestas y le preguntaron al presidente Abinader “¿qué pasó con su compromiso de respaldar las tres causales?”
Natalia Mármol, una de las voceras del campamento “3C”, destacó que “el PRM era el único partido que tenía oficialmente una postura de apoyo a las tres causales, y ahora nos están dando la espalda”.
El mandatario señaló que las autoridades de su Gobierno están trabajando en un proyecto de ley para aprobar un referéndum, donde la población se manifieste a favor o en contra del aborto.
Estas palabras de Abinader calaron en la opinión pública así como en diversos congresistas que calificaron la acción del presidente como una “actitud oportunista”.
Yván Lorenzo, vocero en el Senado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), manifestó que “es una táctica dilatoria para no cumplir un compromiso que tienen ellos (los miembros del PRM) con las mujeres que lo habían contraído en la campaña electoral”.
La postura del PLD
El pasado 26 de abril el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), principal partido de la oposición, anunció su apoyo hacia la despenalización del aborto bajo las tres causales de manera oficial.
Su secretario general, Charles Mariotti, anunció la decisión como resultado de una reunión del Comité Político, la cual estuvo encabezada por el presidente del partido y observador en su momento del proyecto de ley, Danilo Medina.
“El partido decidió aprobar las tres causales”, expresó Mariotti y recalcó que con esa postura el PLD acogía la propuesta formulada hace años por Medina ante la Cámara Baja.
Por otro lado, el vocero en la Cámara de Diputados del PLD, Gustavo Sánchez, expresó sus felicitaciones hacia Abinader, ya que “al igual que el entonces presidente Danilo Medina ha tenido la responsabilidad de evitar que a través del esperado Código Penal se penalice a la mujer por interrumpir el embarazo en condiciones muy especiales”.
Cabe resaltar que en la actualidad el partido morado es la segunda mayoría en el Congreso Nacional, contrario a la realidad que se veía en la pasada gestión gubernamental donde tuvieron primera mayoría por más de una década.
En vista de esto, la votación de sus miembros no resulta directamente “decisiva” al momento de aprobar o no el proyecto de ley, pero podría inclinar la balanza con cierto apoyo del oficialista PRM.
El PRD: antes en contra pero ahora a favor
En el 2009, con Leonel Fernández en el poder, el entonces principal partido de la oposición, el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) se pronunció en apoyo a la “inviolabilidad de la vida desde la concepción hasta la muerte del ser humano”.
Orlando Jorge Mera, exsecretario general del PRD, aseguró que el partido aprobaba la posición de “preservación de la vida” en apoyo a la postura de la Iglesia Católica de rechazo al aborto bajo cualquier circunstancia.
Debido a que la despenalización del aborto bajo las tres causales fue una propuesta del PLD, Jorge Mera sostuvo que “el PLD tiene que presentarnos al PRD y a los demás partidos políticos una propuesta y cuando se formalice deberá ser debidamente ponderada por nuestro partido”.
Cinco años más tarde el entonces candidato a la presidencia por el PRD, Miguel Vargas Maldonado, se reunió con integrantes de la Conferencia del Episcopado Dominicano para discutir las observaciones hechas por Danilo Medina al Código Penal.
Y su opinión fue la siguiente: “ya ese tema fue discutido en la reforma constitucional que aprobamos en 2010 y debemos ser coherentes, no podemos tener un Código Penal que diga lo contrario a lo que establece la Carta Magna”.
Con lo que “establece la Carta Magna” Vargas se refería al artículo 37 de la Constitución Dominicana, donde se establece el derecho a la vida.
“El derecho a la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte. No podrá establecerse, pronunciarse ni aplicarse, en ningún caso, la pena de muerte”, instaura el documento.
En el 2017 el exvocero de la bancada del PRD en la Cámara de Diputados, José González Sánchez, resaltó que “aquí (en el Congreso) se fueron las líneas de los partidos políticos, aquí no hay vocero de nadie, aquí cada quien ha sido vocero de cada quien”.
Contrario a lo planteado una vez por el presidente del partido, Sánchez aseguró que el PRD votaría a favor de las últimas dos causales “a favor de la vida y a favor del Código Penal, esa será nuestra votación”.
¿Las causales van?
La Cámara de Diputados aprobó en primera lectura el Código Penal este año en el que, según algunos, se incluye la causal de la despenalización del aborto en caso del riesgo para la vida de la madre y se dejan las otras afuera.
146 votos a favor y 14 en contra del informe favorable que establece modificaciones al proyecto de ley del Código fueron suficientes para llegar a esta conclusión.
El artículo 112 del proyecto contempla un eximente, interpretado por algunas personas como “causal”, sin embargo, otros niegan que se trate de una de las causales por las que luchan los “proelección”, lo que ha generado un extenso debate.
“La interrupción del embarazo practicado por personal médico especializado en establecimientos de salud, públicos o privados, no es punible si, con antelación, para salvar las vidas de la madre y del feto en peligro, se agotan todos los medios científicos y técnicos disponibles hasta donde sea posible. En esas circunstancias, las conductas se considerarán como propias del hecho justificable del estado de necesidad”, indica el artículo.
El proyecto ha vuelto a la Comisión de Justicia por un período de 15 días donde se podrán presentar recomendaciones y objeciones antes de que sea votado nuevamente por los legisladores.