Implicados en entramado de corrupción en caso Coral llevan una semana detenidos
Las cinco personas arrestadas por presuntos actos de corrupción y otros delitos, en la operación Coral, ya llevan una semana detenidas, en espera de que se les conozca la medida de coerción.
Fueron arrestadas el sábado 24 de abril durante varios allanamientos realizados por el Ministerio Público, que está pidiendo un año de prisión preventiva para el grupo.
Se desconoce dónde están detenidos, ya que según informes extraoficiales, son movidos de lugar.
Se supo que hoy no están en la cárcel preventiva de Ciudad Nueva, pero no se ha informado a dónde fueron llevados por las autoridades del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria, que están a cargo de ese recinto, ni los motivos. Esa cárcel preventiva se mantiene con poco flujo de visitantes.
La medida de coerción no ha sido conocida por el tribunal de atención permanente del Distrito Nacional, debido a los incidentes presentados por los abogados de los implicados, que han argumentado que necesitan tiempo para conocer las pruebas y preparar sus medios de defensa.
La audiencia fue aplazada esta semana en dos oportunidades. Y este viernes fue suspendida, sin una fecha, por la recusación presentada contra la jueza Kenya Romero. Ahora, le corresponde a la Corte de Apelación del Distrito Nacional decidir si acoge o rechaza la objeción, lo cual ya será determinado a partir del lunes, debido que los fines de semana solo funcionan los tribunales de atención permanente.
Están acusados por el ministerio público el mayor general Adams Cáceres Silvestre, la pastora Rossy Guzmán Sánchez, Tanner Antonio Flete Guzmán, Rafael Núñez de Aza y Raúl Alejandro Girón Jiménez.
Se les atribuye incurrir en corrupción, asociación de malhechores, enriquecimiento ilícito, testaferrato, estafa y otros delitos contra el Estado.
Las investigaciones de este caso son dirigidas por la procuradora adjunta Yeni Berenice Reynoso, directora nacional de persecución del ministerio público junto al director de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), Wilson Camacho, acompañado de un equipo de fiscales.
Berenice Reynoso enfatizó ayer que el ministerio público está trabajando en esa investigación prácticamente 24 horas al día, con equipos divididos, y que continuarán profundizándolas.