Los policías que mataron pareja son trasladados ocultando sus rostros
Aunque llegaron a la Fiscalía del municipio de Villa Altagracia, sin esposas, a la hora de su traslado a la cárcel de Bonao, luego de concluido un extenso interrogatorio este jueves, los seis policías destituidos por dar muerte a la pareja de esposos Joel Díaz y Elizabeth Muñoz, poseián esposas compartidas pero debido a las gorras y la mascarilla era imposible identificar sus rostros.
El segundo teniente Victorino Reyes Navarro, el sargento Domingo Perdomo Reyes, los cabos Norkys Rodríguez Jiménez y Ángel de los Santos, y los rasos Anthony Castro Pérez y Juan Manuel Ogando Solís, llegaron a la Fiscalía pasadas las 10 de la mañana, sin tener esposas en sus muñecas y agarrados por los hombros de otros miembros de la uniformada.
Incluso uno de ellos llevaba una funda en la mano sin que se pueda percibir su contenido.
Este jueves el Ministerio Público depositó la medida de coerción contra los imputados, que ayer había adelantado contendría la petición de un año de prisión preventiva contra el grupo.
Mientras que el Ministerio de Interior y Policía anunció que creó una comisión externa "para realizar una verdadera y efectiva depuración de la institución para separar el personal que no cumpla con el perfil ético, moral y la adecuada formación".
De igual forma, se anunció la destitución de los seis policías y la suspensión del coronel César Maríñez Lora, comandante operativo de Villa Altagracia.
El presidente Luis Abinader se dirigió el miércoles a todo el país donde visiblemente enojado por este hecho, advirtió que en República Dominicana no cabía la impunidad ni la arbitrariedad.
“En este país no caben ya la impunidad, la arbitrariedad ni el abuso. Para nadie, ni con nadie”, dijo el presidente Luis Abinader.
Asimismo, dijo que toda la fuerza del Estado estará al servicio de la gente para garantizar sus derechos y nunca para arrebatárselos.
Joel Díaz y Elizabeth Muñoz fueron asesinados por una patrulla policial la noche del martes, cuando regresaban de un culto evangélico por la altura de Villa Altagracia.
De acuerdo a la versión de los miembros de la uniformada, la pareja fue confundida con “delincuentes”.