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Lejanía afecta ventas en Mercado de la Pulga

La plaza comercial funciona desde el 16 de diciembre de 2020 en el Merca Santo Domingo tras ser movida del km. 12 de la autopista Duarte.

Vendedores alegan que pocos conocen la nueva ubicación del mercado. HELENY AMPARO /

Helenny AmparoSanto Domingo, RD

Han pasado más de tres meses desde que los ven­dedores de la pulga del ki­lómetro 12 de la autopista Duarte fueron trasladados al Merca Santo Domingo de forma temporal, pero a pesar del tiempo en el lu­gar, los comerciantes aún luchan afanosos por atraer a su clientela.

La lejanía y la dificultad de transporte público han si­do, según varios entrevis­tados, los principales obs­táculos que han tenido que enfrentar en la nueva ubi­cación, la cual ya ha des­alentado a cerca de 2,700 negociantes de unos 4,500 que conforman la matrícu­la comercial que maneja la Asociación de Comercian­tes del Mercado de la Pul­ga.

Emberly Ramírez, nego­ciante que llega cada do­mingo desde Santiago a comercializar ropa de mu­jer, expresó que “es muy difícil”, pero están traba­jando para hacer el punto comercial.

Ramírez aseguró, además, que “la cosa” está mejo­rando en comparación con las primeras semanas en la nueva ubicación.

Contrario a Ramírez, Jairo Pérez indicó que la venta no está incrementando de­bido a que la gente desco­noce de la reubicación del mercado.

“No, la gente no está vi­niendo, pero es porque no saben que estamos aquí”,

detalló Pérez, al tiempo de manifestar que las autorida­des deberían ayudarlos con promoción y publicidad.

Dificultad para llegar En otras de las carpas que protegen del inclemente sol a los vendedores y sus mer­cancías, se encontraba Dil­cio Sánchez, que promocio­naba a toda voz la venta de “ropa buena, bonita y bara­ta”.

Piden rutas Sánchez atribuyó la lentitud con que se venden los artí­culos a la falta de rutas de carros que le permitan a la ciudadanía llegar con facili­dad.

“Si por lo menos pusieran una ruta de concho desde la Duarte esto de una vez se llena, pero la gente tiene que pagar dos y tres carros, y hasta un motor”, argu­mentó el comerciante.

Promesas gubernamentales De su lado, el secretario ge­neral de la Asociación de Comerciantes del Mercado de la Pulga, Luis Lora, pun­tualizó que antes del tras­lado, el ministro adminis­trativo de la presidencia, José Ignacio Paliza, pro­metió que las unidades de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA) de los corredores Kennedy y 27 de febrero se extenderían hasta la Pulga, pero no ha cumplido.

“Por aquí ahora están pa­sando los corredores del ki­lómetro 13 y la Luperón, pero son los de la Kennedy y la 27 los que estamos espe­rando”, acotó.

Así mismo, Lora resaltó que el presidente de la Re­pública Luis Abinader les aseguró que les construiría un mercado en la autopis­ta Seis de Noviembre en un plazo de ocho meses, el mis­mo periodo que acordaron con el Merca.

CLIENTES Mejoras. Compradores coinciden que la reubicación “se la ha puesto en china”, aunque ha mejorado la organización, higiene, orden y seguridad.

Más higiene. “En el kilómetro 12 eso estaba fuera de control y ahora se puede caminar y no hay ni mal olor”, externó Engel Mejía, mientras buscaba camisas y corbatas entre una pila de ropa en el Mercado de la Pulga.