Mayoría de infectados con VIH son mujeres
El director de Conavihsida plantea que vulnerabilidad de la mujer frente a la epidemia del VIH está relacionada con las desigualdades.
El director ejecutivo del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (Conavihsida), Enrique González, reveló ayer que en la República Dominicana viven 71,985 personas con VIH, de los cuales el 51 por ciento son mujeres.
“La vulnerabilidad de la mujer frente a la epidemia del VIH está relacionada con las desigualdades que la afectan en ámbitos sensibles de la vida social”, precisó el funcionario en un mensaje del Conavihsida con ocasión del Día Internacional de la Mujer.
Desigualdad Consideró que la fecha es un día para reflexionar sobre la condición de la mujer y los retos que plantea la desigualdad que las afecta como sector.
“Aun en la actualidad existe un círculo vicioso de desigualdades, violencia de género e infección por el VIH en muchas partes del mundo, incluyendo la República Dominicana, que plantea grandes retos a las políticas para mejorar su situación”, añadió el facultativo.
El director del Conavihsida citó entre los retos pendientes la reducción a un 50% de las nuevas infecciones en VIH y el aumento de las expectativas de vida de la población que padece con esa condición en el país, incluyendo el grupo poblacional de las mujeres en condiciones de vulnerabilidad.
González expresó que tanto el Conavihsida como las demás instituciones públicas y privadas integradas a la Respuesta Nacional orientan sus esfuerzos actuales a fortalecer las estrategias de prevención y atención para asegurar el acceso universal a la educación, una atención de alta calidad y el control de las Infecciones de Transmisión Sexual.
“El respeto a los derechos humanos y la igualdad de género es parte fundamental de esas políticas y estrategias”, observó.
SEPA MÁS Efectos. El VIH infecta a las células del sistema inmunitario, alterando o anulando su función.
Transmisión El virus puede transmitirse por las relaciones sexuales vaginales, anales u orales con una persona infectada, la transfusión de sangre contaminada o el uso compartido de agujas, jeringuillas u otros instrumentos punzantes.