Sector Salud

Pandemia y Salud: Un foco de corrupción

ESCáNDALOS HACEN RODAR LAS CABEZAS DE VARIOS MINISTROS DE AMéRICA LATINA

Ashley Ann PresinalSanto Domingo, RD

La crisis sanitaria pro­vocada por la llega­da de la pandemia por Covid-19 ha generado un gran número de re­nuncias y destituciones de minis­tros de salud y otros funcionarios del sector en toda Latinoamérica que ha dado lugar a una “vieja epi­demia” que carcome a la región.

La develación en los últimos me­ses de múltiples escándalos que in­volucran compras irregulares de equipos médicos, falta de insumos hospitalarios, vacunación irregular de funcionarios públicos y mane­jo “inadecuado” del virus por parte de las autoridades sanitarias, han amenazado aún más el “frágil” sis­tema de salud que impera en la zo­na.

Entre los países que componen el extenso listado de autoridades sanitarias que han cesado de sus funciones al frente de la cartera de salud, República Dominicana tiene uno de los casos más recientes.

El pasado 26 de febrero, a sólo un día de su primera rendición de cuentas ante la población domini­cana, el presidente de la República, Luis Abinader, destituyó al enton­ces ministro de Salud Pública, Plu­tarco Arias, por medio del decreto 131-21.

La medida, que tuvo lugar pasa­das las 10:00 de la noche del vier­nes, sorprendió a muchos. Arias fue nombrado por el mandatario du­rante su toma de posesión y había depositado en él su “confianza” pa­ra hacer frente al coronavirus en el país.

La disposición de Abinader se produjo luego de que saliera a la luz una licitación para la compra de je­ringuillas que serían utilizadas en el Plan Nacional de Vacunación con­tra el Covid-19 y que posteriormen­te fue cancelada por una denuncia de alteración de precios.

Un día después el exfuncionario se defendió diciendo que hay secto­res interesados en emitir “extorsio­nes y chantajes” para distorsionar su labor.

A continuación el listado de paí­ses donde esta práctica se ha vuelto recurrente.

Paraguay El caso de Paraguay es otro de los más recientes. Ayer Julio Mazzole­ni, ministro de la cartera de salud, renunció a su cargo debido a la falta de medicamentos básicos y vacunas contra el coronavirus, mientras au­menta la crisis sanitaria en el país.

La nación suramericana todavía espera por el envío de 4,3 millones de dosis de la vacuna AstraZeneca a través del mecanismo COVAX.

“Con el Congreso, por el bien de la nación, hemos acordado que yo deje el Ministerio de Salud para ge­nerar la paz que necesitamos”, ex­presó el ahora exministro a la agen­cia de noticias AP.

El viceministro Julio Borba tomó su lugar mientras el país espera por la designación de la nueva autori­dad sanitaria.

Perú En este país estalló el mayor escán­dalo de vacunaciones irregulares contra el Covid-19: el “Vacunaga­te”.

Todo inició el pasado 10 de fe­brero, cuando se desveló que 101 altos funcionarios del Poder Eje­cutivo, incluyendo a sus familiares y allegados, se vacunaron con dos dosis de la vacuna china Sinopharm antes de que siquiera se distribuye­ra a la población peruana.

De acuerdo con el listado divul­gado por la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), 487 personas correspondientes a 26 grupos fami­liares recibieron la inoculación de manera irregular antes y después del proceso de compra de la vacuna al margen de la Fase III de los ensa­yos clínicos.

Las piezas comenzaron a caer como “efecto dominó” cuando se hizo de conocimiento público que el expresidente peruano, Martín Viz­carra, se había vacunado en secreto contra el coronavirus en el Palacio de Gobierno en octubre de 2020.

En noviembre de ese mismo año Vizcarra fue destituido por el Con­greso Nacional por supuesta “inca­pacidad moral”.

La Universidad Peruana Caye­tano Heredia fue la sede donde se les facilitó el acceso a las vacunas a personas que no se presentaron como voluntarios al estudio clíni­co, así como a ocho miembros de la Comisión negociadora.

Entre los que formaron parte de las inoculaciones secretas figuran altos funcionarios que integraban hasta hace unos días el gobierno de Francisco Sagasti, tales como la ex­ministra de Relaciones Exteriores, Elizabeth Astete, y la exministra de Salud, Pilar Mazzetti.

A la lista también se agregan dos viceministros de Salud y otros 10 funcionarios de esa cartera.

Dos días después de que el es­cándalo saliera a la luz, Mazzetti re­nunció a su cargo y admitió haber­se vacunado con Sinopharm. El 14 de febrero siguió sus pasos Astete, quien se defendió diciendo que “no podía darse el lujo de caer enfer­ma” en el proceso de negociaciones de las vacunas.

Antes del confinamiento Antes de que la pandemia obligara al país a guardar cuarentena obli­gatoria, el 20 de marzo de 2020 el expresidente Vizcarra despidió a la entonces ministra de salud, Eliza­beth Hinostroza, tras conocerse la muerte de una persona que espe­ró por varios días el resultado de un examen de Covid-19.

Posteriormente, el 15 de julio el mandatario destituyó al sucesor de Hinostroza, Víctor Zamora, quien había sido juzgado de manera seve­ra por sus estrategias en el manejo de la crisis sanitaria.

En su carta de renuncia, Andra­muño expresó que se le “compli­có” enfrentar una emergencia sa­nitaria sin recursos. “También me resulta inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen co­nocimiento de salud pública y de la realidad frente a esta situación”, agregó. En su lugar, el mandatario nombró al cardiólogo Juan Carlos Zevallos en medio de la situación de emergencia que apenas se abría paso en el país.

No obstante, el 26 de febrero del año en curso Zevallos renun­ció tras un escándalo por su mane­jo del plan de vacunación contra el coronavirus. Horas más tarde tam­bién presentó su dimisión el vice­ministro de la cartera, Xavier Solór­zano, por las mismas razones.

La razón detrás de la renuncia fue la revelación de que familiares y allegados del ministro, incluida su madre de 87 años, fueron va­cunados con las primeras dosis im­portadas “saltándose la lista” de los que se encontraban esperando por la vacuna en la fase cero.

Inmediatamente la Asamblea Nacional de Ecuador le exigió al mandatario que destituyera al mi­nistro y pidió un juicio político, sin embargo, Zevallos nunca compa­reció. Todavía no se conoce la lista de quienes están siendo vacuna­dos.

Argentina El pasado 19 de febrero Ginés González García renunció a su car­go al frente del Ministerio de Salud luego de que se desvelara uno de los mayores escándalos en el cono sur: en su despacho funcionaba un “Vacunatorio VIP” donde existían privilegios para recibir la vacuna contra el Covid-19.

El escándalo parecido al “Va­cunagate” de Perú fue destapado por el periodista Horacio Verbitsky, quien relató a la emisora de radio “El Destape” que la entidad dirigi­da por el exfuncionario le ofreció aplicarle la vacuna Sputnik V direc­tamente en sus instalaciones.

Horas antes de la renuncia, el presidente de argentina, Alberto Fernández, le había pedido a Gar­cía que dimitiera de su cargo por gestionar la vacunación de un se­lecto grupo de personas cercanas al Gobierno.

Nueve días más tarde, el Minis­terio de Salud dio a conocer un lis­tado con los nombres de 70 per­sonas que recibieron de forma secreta y privilegiada la vacuna ru­sa Sputnik V antes de que llegara al personal de primera línea, docen­tes, personas de edad avanzada o pacientes con comorbilidades.

Guatemala A partir del 19 de marzo del pasa­do año inició la ola de destitucio­nes en el país centroamericano.

Todo inició con el despido de Danilo Sandoval Flores, viceminis­tro Administrativo y Financiero del Ministerio de Salud Pública y Asis­tencia Social (MSPAS).

La destitución fue ordenada por el mandatario, Alejandro Giam­mattei, quien alegó que Flores es­taba “incapacitado” para gestionar la pandemia de Covid-19 que arre­mete contra Guatemala.

En una publicación realizada a través de Twitter, el MSPAS infor­mó a la población que el exfuncio­nario había sido destituido a peti­ción del ministro de salud, Hugo Monroy, en vista de “su incapaci­dad en la gestión de insumos en esta crisis sanitaria (…) además de posibles irregularidades durante su gestión”.

Un mes y un día más tarde tam­bién fueron destituidos los vicemi­nistros Rodolfo Galdámez y Héc­tor Marroquín, quienes junto a Flores se encuentran bajo investi­gación de las autoridades por irre­gularidades en su breve período en el Ministerio de Salud.

A casi tres meses de haberse ini­ciado el periodo de destituciones, el 16 de junio, se confirmó la re­nuncia del jefe de Epidemiología del Ministerio de Salud, Manuel Sagastume, por causas similares a las anteriores.

Tres días más tarde el presiden­te del país centroamericano confir­mó la destitución del entonces mi­nistro de Salud, Hugo Monroy y sus dos viceministros restantes.

Brasil El 16 de abril del pasado año el presidente Jair Bolsonaro anun­ció la destitución del médico Luiz Henrique Mandetta, quien desem­peñaba el rol de ministro de Salud desde el inicio de la pandemia por coronavirus.

Mandetta y Bolsonaro habían tenido conflictos en cuanto al ma­nejo de la crisis sanitaria en el país suramericano, ya que nunca se pu­sieron de acuerdo en temas como el aislamiento social y el uso de la cloroquina para tratar la enferme­dad.

Mientras el mandatario defen­día el uso del fármaco en los prime­ros síntomas del virus, el protocolo del Ministerio de Salud establecía que este sólo podía usarse en casos graves de pacientes hospitalizados.

Tan sólo un mes más tarde, el sustituto de Mandetta, Nelson Teich, anunció su renuncia al cargo frente a la cartera de salud.

Al igual que su antecesor, Teich no estaba de acuerdo con la im­plementación masiva del medica­mento y se opuso a la apertura de gimnasios y salones de belleza en medio de la pandemia. En su lugar, instó a que las personas permane­cieran en casa.

Bolivia El 20 de mayo del año pasado el ministro de salud boliviano, Mar­celo Navajas, fue capturado por las autoridades nacionales y destituido de su cargo por su alegada partici­pación en un escándalo de sobreva­loración de 170 ventiladores para su uso en emergencias.

La presidenta interina de la na­ción, Jeanine Áñez, cesó de sus funciones a Navajas con tan sólo un mes y medio de gestión luego de que se destapó el caso de co­rrupción.

De acuerdo con las investigacio­nes realizadas por el gobierno boli­viano, los ventiladores se compra­ron a la firma española GPA Innova por un monto de US$4.8 millones, de los cuales se llegaron a pagar US$2 millones, lo que “triplicó el costo real”.

El mismo día de su destitución, Navajas fue sustituido por María Eidy Roca, una médica cirujano y experta en auditoría, que será procesada por los delitos de conducta antieconómi­ca, contratos lesivos al Estado e in­cumplimiento de deberes.

Aunque ya no continúa en el cargo, contra Roca pesan las im­putaciones de comprar 324 ven­tiladores chinos para emergencias por precios que casi cuadrupli­can su costo original. De acuer­do con la fábrica, el precio real de cada uno de los equipos era de US$8,000 pero Roca los adquirió por US$30,000.

Cuatro días después de que fue­ra acusada, la Fiscalía General de Bolivia solicitó el accionamiento de la alerta migratoria en su contra, lo que le impedirá salir del país.

El Salvador Hace dos días se cumplió un año desde que El Salvador empezó a “dar de baja” a sus funcionarios de la cartera de salud.

El 27 de marzo, Nayib Bukele, presidente de la nación, destituyó a la ministra de Salud, Ana Orella­na Bendek, sin añadir detalles acer­ca de los motivos del cese del cargo que desempeñaba desde el primero de junio de 2019.

En su lugar fue colocado al fren­te del ministerio, Francisco Ala­bi, en consecución del objetivo de Bukele: “proteger la vida de los sal­vadoreños”.

No obstante, un informe preli­minar de la Comisión Especial de la Asamblea Legislativa, emitido el pasado 15 de febrero, recomendó al mandatario la destitución de Ala­bi por presuntas irregularidades en compras y acuerdos.

Panamá El 24 de junio de 2020 el presiden­te de la nación, Laurentino Cortizo, hizo público el despido de la docto­ra Rosario Turner, quien fungía co­mo ministra de Salud desde julio de 2019.

En sus declaraciones, Corti­zo señaló que a pesar de que la exministra había realizado una labor “encomiable” en la lu­cha contra la pandemia la nota­ba “cansada”, y en su lugar fue nombrado su viceministro Luis Francisco Sucre.

COVID-19 EN CIFRAS Según el mapa interactivo de Covid-19 realizado por la Uni­versidad Johns Hopkins, en el mundo sobrepasan los 110 millones de casos y las 2 mi­llones 500 mil defunciones por coronavirus.

Entre los países latinoame­ricanos Brasil es uno de los que alberga mayor canti­dad de casos con un total de 10,551,259, cifra que lo colo­ca como el tercer país en nú­mero de contagios después de Estados Unidos e India.