Las vueltas de la justicia: Miriam Germán de ser descalificada a dirigir un gran proceso anticorrupción
Muchos recuerdan la frase: “Si esto fuera de doble vía, hablaríamos de usted”, se ajusta a la expresión las vueltas que da la vida, pero en esta ocasión, las vueltas de la justicia.
La autora es Miriam Germán Brito, quien la pronunció cuando fue descalificada para continuar como jueza de la Suprema Corte de Justicia, por los cuestionamientos que les hizo el entonces jefe del Ministerio Público, Jean Alain Rodríguez. De ese escenario pasó ahora a dirigir un gran proceso judicial en contra de la pasada administración por actos de corrupción.
Germán Brito es la jefa de ese Ministerio Público que ayer dispuso el arresto de al menos 10 exfuncionarios y presuntos “testaferros”, en los que se incluyen a dos hermanos del expresidente Danilo Medina.
Los cuestionamientos de Jean Alain a Germán Brito fueron hechos en la reunión del Consejo Nacional de la Magistratura, que encabezaba el presidente Danilo Medina, en marzo de 2019, e integraban el presidente de la SCJ, Mariano Germán Mejía, el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez; el senador José Ignacio Paliza y la diputada Josefa Castillo. Estos dos últimos hoy ministro Administrativo de la Presidencia y Superintendente de Seguros, respectivamente.
La magistrada no pasó la evaluación. El exprocurador la acusó de ser amiga de Víctor Díaz Rúa, imputado en el caso Odebrecht y de tener reuniones ocultas, basado en dos cartas anónima.
Pero esto no es todo, la expresidenta de la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia también fue cuestionada por su patrimonio y salió a relucir que su teléfono fue intervenido.
Siempre calmada, Germán Brito se defendía de los cuestionamientos y hasta llegó a calificarlos como una “canallada” de parte del exprocurador y “los canallas, yo no me dejo arrinconar por ellos”.
Cuando se creía que todo había quedado en el pasado, surge el nuevo Gobierno que encabeza Luis Abinader y acoge la propuesta de distintos sectores de la sociedad para que la magistrada Germán Brito dirigiera la Procuraduría General de la República, y a su lado Yeni Berenice Reynoso, quien había sido fiscal del Distrito Nacional.
Germán Brito al asumir el cargo y aseguró que no llegaba a la posición para “cobrarle nada a nadie”, que su aspiración era “una justicia sin retaliaciones, sin viejas venganzas”.
En este nuevo escenario, a 106 días de la nueva gestión administrativa comienza un proceso, en horas de la madrugada, con el apresamiento de Carmen Magalys Medina Sánchez, exvicepresidenta del Fondo Patrimonial de las Empresas Reformadas (Fonper), y Juan Alexis Medina Sánchez, hermanos del expresidente Medina.
También Francisco Pagán, exdirector de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe); Freddy Hidalgo, exministro de Salud Pública; el ex presidente del Fonper, Fernando Rosa; el excontralor general de la República, Rafael Antonio Germosén Andújar, Aquiles Alejandro Crístofer, Julián Esteban Suriel Suazo, José Dolores Santana Carmona, y Domingo Antonio Santiago Muñoz.
Las acusaciones son de corrupción y de fungir como testaferros que aprovecharon vínculos familiares con el poder político para acumular fortunas durante el pasado de gobierno.
La procuradora no habla de los arrestos
La procuradora, quien está de reposo tras haber presentado infección urinarias que obligaron su internamiento, no se ha referido a los arrestos, pero figura en una fotografía sonriente con Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca).
La fotografía fue enviada por la Procuraduría, con una nota donde indicaba que Camacho había puesto al tanto de los arrestos a la magistrada Germán Brito, y que las detenciones fueron “con estricto respeto a los derechos y a la privacidad de los imputados de parte del Ministerio Público”.