Justicia

Berlinesa: no se trata de proceso por corrupción, tras 7 horas en la fiscalía

La exdirectora de Inaipi acudió a la Fiscalía tras ser citada el pasado lunes para responder en caso de corrupción en esa dependencia.

Berlinesa Franco fue interrogada alrededor de ocho horas en la Fiscalía del Distrito Nacional sobre el caso Inaipi.

Javier Flores / Adriana PegueroSanto Domingo, RD

“Aquí solamente es una in­vestigación, pero vamos a esperar que la Fiscalía emita sus comentarios. No se trata de un proceso por corrupción”, dijo Berli­nesa Franco, tras someter­se a unas siete horas de in­terrogatorios en la Fiscalía del Distrito Nacional.

La exdirectora del Insti­tuto Nacional de Atención Integral a la Primera In­fancia (Inaipi), viuda del fenecido alcalde de San­to Domingo Este, Juan de

los Santos, respondió pre­guntas de los fiscales inves­tigadores, Elvira Rodríguez y Karina Concepción, así co­mo de Narciso Escaño, de la Procuraduría Especiali­zada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA). Fue citada esta se­mana por la fiscal del Dis­trito Nacional, Rosalba Ra­mos.

Habían pasado cuatro meses desde que el empre­sario Pablo Cabrera hizo la denuncia en el programa de televisión “Esta Noche Ma­riasela”, de que en el Inai­pi se cometieron irregula

ridades en el proceso de licitación para la compra de 40,000 kits de alimentos por RD$100 millones.

La renuncia Tras la denuncia renun­ció la directora del Inaipi, Berlinesa Franco, y fueron destituidos el director de operaciones, Ricardo Guz­mán; la directora de Com­pras, Maira Martínez; Juan López, subdirector gene­ral de Gestión Institucio­nal; Ramona Hernández, directora Administrativa y Financiera; Alberto José Patxot, director de Planifi­cación y Desarrollo; Stefany Severino Cuello, encargada del Departamento Jurídico, y Clementina Pietier, res­ponsable de Acceso a la In­formación Pública, quienes serían puestos a disposi­ción de la justicia, según in­formó Flavio Dario Espinal, consultor jurídico del Poder Ejecutivo en ese entonces.

Ayer Franco ingresó al despacho de la fiscal a las 10:00 de la mañana acom­pañada de su abogada Emery Colomby Rodríguez, con quien salió a las 6:40 de la noche.

“Todas estas horas que hemos estado aquí han sido en el marco de indagar res­pecto de las otras personas que han sido entrevistadas por esta misma fiscalía, y en ese contexto la señora Berli­nesa Franco estuvo respon­diendo algunas inquietu­des”, manifestó la abogada.

Expresó que el país pue­de tener la certeza de que en su momento, ya que ahora se está en la etapa preparatoria del proceso, sabrán que no se trata de un proceso por corrupción.

“La señora Berlinesa Franco, sin dudas, no ha co­metido ningún acto de co­rrupción en la institución que representaba”, enfati­zó.

Franco llegó al Palacio de Justicia de Ciudad Nue­va con lentes negros y mas­carilla, vestida de negro y con un color castaño en sus cabellos, abandonando su acostumbrado pelo negro.

El retraso del caso La fiscal agregó que la crisis del coronavirus (Co­vid-19) había dificultado el proceso de entrevista de los imputados en el caso. “También recuerden que con esto de la pandemia los trabajos han sido mu­cho más lentos y en un mo­mento se tuvo que suspen­der porque teníamos varias personas infectadas de Co­vid-19”, añadió la fiscal del Distrito Nacional.

“El Ministerio Público es independiente, las investi­gaciones se realizan en el momento que sean perti­nentes y este es el momento que se consideró adecuado para realizar esta entrevis­ta”, recalcó.

EL CASO Juramentación La citación de Berlinesa no se produjo hasta el lunes 17, justamente un día después de que las nuevas autoridades del gobierno de Luis Abina­der asumieran el poder.

Iría otra vez Ramos, la fiscal del DN, aseguró que no se des­carta volver a entrevistar a Franco, pero que eso se determinará una vez se analicen las pruebas y las informaciones sumi­nistradas.

Fase secreta Dijo que la Fiscalía es­tá en una fase secreta­da de investigación, con la búsqueda de testimo­nios y pruebas. Sobre el tiempo que duró la en­trevista, expresó que “no se podía limitar la par­ticipación de la señora por el número de horas sino por la cantidad de información”.