RECORRIDO
Luego de medirle la temperatura a un cliente: “Esto me marca rojo, espérese señor”
TOMAR LAS TEMPERATURAS EN UNA DE LAS MEDIDAS PRINCIPALES PARA PODER ACCEDER A ALGUNAS FARMACIAS DE SANTO DOMINGO
Es de tez oscura, estatura alta, aproximadamente 60 años de edad y llevaba prisa. Se trata de un hombre que intentó acceder a una farmacia de la ciudad de Santo Domingo y de inmediato una de las empleadas del establecimiento le dio la bienvenida con el protocolo de prevención contra COVID-19.
Portaba lentes y un papel blanco en una de sus manos y daba la impresión de buscar algo en específico, por tanto, luego de responderle el saludo a la empleada le preguntó directamente por lo que tenía escrito.
La representante le muestra empatía y le dice “sí, señor, deme un momento”, vamos a medirle la temperatura para que “pase allá”, señalando con su dedo índice el mostrador de la farmacia.
El hombre extiende su antebrazo y la joven coloca el medidor y le dice: “esto me marca rojo, espérese señor”. El hombre que portaba mascarilla, un pantalón marrón y una camisa de cuadros salió en defensa y dijo que seguro era por el sol, y se mantuvo esperando.
La joven un poco asombrada mantuvo su distancia y disimuladamente para no ahuyentar a los demás clientes, le indicó un puesto alejado de los demás, para proceder a medírsela otra vez dentro de unos minutos para confirmar si podría ser por "la constante exposición al sol".
El cliente se mostraba tranquilo y seguro de su salud pero le urgía encontrar lo que buscaba. Aparentemente venía de un lugar cercano caminando.
Las tomas de temperaturas son obligatorias y posteriormente la aplicación de gel antibacterial para dar paso a realizar la compra del fármaco.
En otras farmacias se les aplica las medidas anteriores, pero también se debe de tener una distancia prudente del mostrador, el cual está cercado con cinta amarilla y señalizado con un letrero que indica: “Por favor mantener la distancia” acompañado de otro que dice “Por favor no cruzar”.
Poca demanda
Ante las expectativas de un nuevo estado de emergencia para evitar la propagación del nuevo coronavirus, algunas farmacias de Santo Domingo se preparan para la demanda de insumos que posiblemente habrá en los próximos días, ya que hasta el momento no se registra un incremento notorio de los mismos.
En los centros de abastecimiento de fármacos visitados este jueves, también se observó que todos tienen un protocolo establecido antes de permitir la entrada del cliente.
Precios mascarillas
Los precios de las mascarillas varían dependiendo el tipo o nivel de protección. En algunas farmacias de Santo Domingo los tapabocas denominados N95 cuestan desde 165 a 200 la unidad, pudiendo variar el precio a uno más alto.
Mientras que las mascarillas quirúrgicas, una de las más comunes y caracterizadas por su color azul claro, van desde 35 a 50 cada una. Estas también pueden tener otro precio más alto por unidad o la posibilidad de tener descuento si son compradas al por mayor.
Medicamentos buscados
Por otro lado, los medicamentos nombrados Azitromicina, Ivermectina, Vitaminas C y B3 son las más buscadas en las últimas semanas dijo la que asiste a servicio al cliente de una farmacia del centro de la ciudad. La mujer decidió no revelar su nombre.
Además, expresó que los clientes que acuden para adquirir las medicinas anteriores son indicados por un especialista, ya que los ciudadanos presentan previamente su indicación autorizada y sellada por el centro de salud y el médico.