Todavía no tienen fecha para reunión Consejo de Educación

Aún se desconoce el día en que se reunirá el Conse­jo Nacional de Educación para consensuar las pro­puestas de protocolo suge­ridas por distintas entida­des educativas y que en la actualidad analiza una co­misión designada para es­tos fines.

Según información ofrecida por el director de comunicación del Minis­terio de Educación, Die­go Pesqueira, la comisión que estudia la compleja situación impuesta por el Covid-19 al sistema edu­cativo debe reunirse la próxima semana y luego que presente su informe, el ministro convocará al Consejo.

La reapertura de las cla­ses el 24 de agosto próxi­mo, plantea un retorno al antiguo modelo de dos tandas, una matutina y otra vespertina, por causa del Covid-19.

La Asociación Domini­cana de Profesores (ADP) y el Ministerio de Educa­ción (Minerd) pusieron a circular una propuesta de protocolo en la que se plantea que la Jornada Es­colar Extendida debe or­ganizarse en dos tandas, una de 8:00 de la mañana a 12:30 pasado el meridia­no y la otra de 1:00 a 4:00 de la tarde, y que el 50% asistirá en la mañana y el otro 50% en la tarde. Cada aula con un máximo de 20 estudiantes.

Esta y otras propuestas sugeridas por entidades del sector educativo son estu­diadas por la comisión. Pa­ra el inicio del próximo año escolar se debe repensar to­da la logística educativa en función de garantizar no solo la salud de más de dos millones de estudiantes y del personal docente y ad­ministrativo, sino también el derecho a una educación de calidad y equitativa.

El director ejecutivo de Educa, Darwin Caraballo, explicó que no se está plan­teando que se elimine la tanda extendida, ya que es­ta es una conquista del pue­blo dominicano financiada por el 4% para garantizar mayor equidad, e indicó que lo que está planteado es que dada la vigencia del Covid en el inicio del año escolar y la necesidad del distanciamiento físico se divida la cantidad de estu­diantes por aula. “Durante la presencia de esta excep­cionalidad es que la jornada extendida se va a usar para alternar lo que se llama el modelo híbrido de educa­ción, que implica una distribución del tiempo en el hogar y en el centro educa­tivo, no quiere decir que el estudiante, una vez termine su tiempo en el centro, no tenga tareas y actividades que seguir cumpliendo”, explicó Caraballo.

El ejecutivo de Educa manifestó que existen tres desafíos importantes en es­ta crisis impuesta por el Co­vid-19.

El primero, evitar la de­serción escolar, ya sea por la inseguridad sanitaria como por la crisis económica que se avecina; el segundo, la calidad de los aprendizajes para evitar una generación Coronavirus que no apren­dió y, el tercer desafío, la equidad en el sistema edu­cativo.

Caraballo explicó que en las escuelas con hora­rios tradicionales (mañana y tarde) lo que se plantea es que dividan su matrícula estudiantil para que asistan en días intercalados, o sea, interdiario. Afirmó que es­ta situación no permite una hiperplanificación desde el nivel central, en este caso se requiere abrir la flexibilidad para que sean los propios centros educativos los que cumpliendo con determi­nados principios y criterios organicen sus estudiantes. Advirtió que las realidades de los centros educativos son distintas y diversas e imponer un formato puede llevar a muchas injusticias e incumplimientos de las nor­mas.

LOGÍSTICA Dificultades. Para el sistema educativo nacional y sobre todo pa­ra el Ministerio de Edu­cación, definir la nueva logística escolar bajo los protocolos para evitar el Covid, implica destinar recursos suficientes y es­tablecer los mecanismos para garantizar los mate­riales de protección para estudiantes, docentes y personal administrativo.

Además del uso de mas­carillas, se debe garanti­zar el suministro de agua y material de higiene pa­ra el lavado de manos. En la actualidad y según el Minerd, existen casi 500 recintos escolares con di­ficultades en el suminis­tro de agua.

Según estadística del Mi­nerd, la comunidad edu­cativa la componen 2.1 millones de estudian­tes en el sistema público, cerca de 500,000 en la educación privada y casi 100,000 docentes.

La nueva logística im­plica también la imple­mentación de nuevos recursos didácticos que garanticen los objetivos curriculares.