Rafael Paz rechaza la legalización matrimonio homosexual en el país

Rafael Paz Familia, candidato a la senaduría en el Distrito Nacional, por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), consideró que la unión homosexual jamás debe ser legalizada en el país, respetando así los dictámenes de la Constitución que reserva la relación conyugal para un hombre y una mujer.

Sin embargo, dijo respetar la decisión de las personas que aun siendo de un mismo sexo deciden establecer relaciones de convivencia que le provea la felicidad que merecen.

Al participar en el programa Periodismo y Sociedad, afirmó que su motivación a aspirar a la senaduría es por el riesgo al que están sometidos, en esta coyuntura, valores fundamentales de la nacionalidad dominicana, ya que está convencido de que hay que enfrentar a quienes pretenden sacar la palabra de Dios de las escuelas.

Enumeró las principales propuestas de su campana, entre las que están, el proyecto de ley del Primer Empleo que persigue la educación dual que “abrirá la oportunidad de romper la barrera de que los jóvenes no acceden a un puesto de trabajo por falta de experiencia”.

Así como el proyecto del Fomento de Clubes Culturales, la creación del Instituto de Protección a los Abuelitos, que les garanticen sus servicios vitales para la salud, recreación y felicidad en sus últimos tiempos de vida y la modificación del Código Procesal Penal, “procurando una justicia más eficiente y de mejores respuestas a los ciudadanos y con el fin de escuchar a la gente, abrirá sendas oficinas en las tres Circunscripciones de la capital”.

Afirmó que es partidario de que la necesaria reforma al Código Laboral sea fruto del consenso entre el sector laboral y empresarial y aprovechó para desmentir que haya realizado propuestas para la modificación al mismo.

Sobre la Ley de Seguridad Social consideró que la prioridad es la lucha por el establecimiento de la Atención Primaria, prometiendo que empleará todas sus fuerzas como senador para que en el presupuesto general de la nación sean asignados los recursos necesarios para la instalación de los centros correspondientes en cada comunidad, lo que le brindará salud y preservará la vida de millones de personas en los sectores marginados, además de que propicia la mayor eficacia de los recursos destinados al sector.