Escasez de agua en Santiago en medio de crisis sanitaria

La desesperación de los habitantes de Santiago aumentó ayer ya que a la escasez de agua embo­tellada se añadió la defi­ciencia en el suministro del líquido en los hogares por parte de la Corpora­ción del Acueducto y Al­cantarillado de Santiago (Coraasan).

Subrayaron que eso di­ficulta aún más su deses­perada situación.

“Si el agua l lega­ra por las llaves, por lo menos se puede hervir y beberla, pero tampo­co la están enviado con regularidad”, dijo Jua­na Martínez Espinal, del sector de Pekín, al sur de Santiago.

Muchos comerciantes dijeron que los camiones tienen entre tres y cua­tro días que no hacen los despachos de botellones.

Mientras, clientes des­esperados buscan el lí­quido procesado a cual­quier precio.

Sin embargo, hay per­sonas que distribuyen el botellón en motocicletas y camionetas a 100 pesos y su precio real oscila en­tre 35 y 40 pesos.

“No hay agua embote­llada, estamos mal y para colmo el río que tenemos (el Yaque del Norte), es una verdadera cloaca a su paso por Santiago”, se quejó Jor­ge Medina Santos, quien di­jo al Listín Diario que ayer visitó al menos nueve esta­blecimientos comerciales de esta ciudad y no encon­tró el producto.

Otras personas coinci­den con Juana Martínez, al expresar que si el suminis­tro de agua potable a los ho­gares fuera eficiente, al me­nos ellos podrían hervirla y beberla.

Cabe destacar que el agua que venden personas en las calles a precios exor­bitantes, se termina de una vez, porque la gente ad­quiere los botellones sin im­portar que su costo esté casi triplicado.

Desde el lunes los bote­llones de agua se han agota­do en los colmados, super­mercados, farmacias y otros negocios que los venden.

Esto también ha provoca­do que mucha gente se dirija directamente a las empresas procesadoras que venden el garrafón a 30 y 35 pesos.

Tags relacionados