César el Abusador
Afloran datos de sicariato con desplome red de ‘El Abusador’
El venezolano Eduardo Luis Martínez, de 48 años, fue abatido la madrugada del jueves 1 de noviembre en el parque de un centro de comida rápida de la capital.
La inusual forma en que han sido asesinados varios extranjeros en plena capital dominicana y en otras ciudades, va aclarando muchos hechos a medida que se desarticulan los tentáculos de la estructura de narcotráfico y blanqueo de capitales dirigidas por César Emilio Peralta (El Abusador).
La madrugada del jueves 1 de noviembre de 2018 cayó abatido a tiros el venezolano Eduardo Luis Martínez, de 48 años, cuya cédula de identidad lo define como empresario.
En ese atentado también murió el comerciante Ariel Rodríguez, pero esté no tenía relación con el hecho, ni era el objetivo, según se informó.
El ataque mortal contra Martínez se produjo a las 5:30 de la mañana e inició en el local de MacDonalds, ubicado en la avenida Abraham Lincoln, en el sector Piantini, y continuó en el parqueo.
Al menos treinta casquillos de balas fueron recogidos por la Policía Científica. Había perforaciones de tiros hasta en edificios cercanos. Hasta el momento, la Policía Nacional no ha explicado las causas de este crimen. Los vehículos involucrados en el tiroteo fueron una yipeta 4Runner 2014, placa G407308, y una Toyota Tundra 2012, de placa L383324.
Luis Martínez era socio de Miguel Ángel Pana Andrioly, alias “Toyo Curiche”, un operador de la zona de La Guajira, una comunidad colombiana cerca de Venezuela, que a su vez fue uno de los principales asociados de César Emilio Peralta.
La Policía de Colombia estableció en su investigación que “Toyo Curiche” habría sido víctima de ajuste de cuenta a manos de bandas rivales, pues tenía tres días de haber llegado a Barranquilla.
“Toyo Curiche” fue asesinado en una plaza comercial de esta ciudad, justo al bajar de la camioneta. Dos sicarios que se desplazaban en una motocicleta se le acercaron y la emprendieron a tiros, sin darle oportunidad de defenderse.
Ataque en la 27 El 12 de septiembre de este año, en la confluencia de las avenidas 27 de Febrero y Tiradentes, a plena luz del día, una pareja que se desplazaba en un vehículo fue atacada a tiros por individuos que montaban una motocicleta, pero ambos sobrevivieron.
El vehículo, un Toyota Corolla, color gris, con placa de exhibición, recibió al menos tres impactos de balas en la parte delantera. Testigos del incidente declararon que los agresores escaparon del lugar de inmediato.
El hombre, identificado como Jean Carlos Vizcaíno, permaneció varios días en estado delicado en una clínica de la ciudad, bajo fuerte vigilancia policial. La seguridad se le fue retirando conforme pasaron los días, y hasta el momento la comunidad desconoce los motivos que desencadenaron este atentado.
Sicarios y sicariato Un sicario es una persona que mata a alguien por encargo de otro, por lo que recibe un pago, generalmente en dinero u otros bienes. Algunos términos sinónimos son, por ejemplo, asesino a sueldo o pistolero, según lo define Wikipedia, la enciclopedia de contenido libre en la red.
Mientras tanto, del sicariato indica que es “un delito en el cual se realizan asesinatos por encargos, por gustos o conveniencia, en la mayoría casos de jóvenes”. Actualmente está en auge, y es un problema social que se encuentra en mayor parte en el narcotráfico, en la venganza por distintas causas y en operacionalizarlo. Los narcotraficantes se proveen utilizando delincuentes comunes y en el caso más grave menores de edad.
Medigraphic,una revista electrónica de psicología Iztacala, señala en un estudio que “el fenómeno del sicariato en países de Latinoamérica ha tenido un impacto a grande escala debido a su alarmante incremento, así como también por los patrones comportamentales de violencia que han caracterizado a los autores materiales de dichos asesinatos”.
Aquí... nada. Recién ahora se supo, tras el arresto en Colombia del dominicano César Emilio Peralta, que el venezolano Eduardo Luis Martínez, del que aquí no se supo nada, aun con la zaña que lo asesinaron, era socio de Miguel Ángel Pana Andrioly, alias “Toyo Curiche”, un operador de la zona de La Guajira, una comunidad colombiana cerca de Venezuela, que a su vez fue uno de los principales asociados de “El Abusador”.