LISTA
Narcotráfico, inmigración y fraude en servicios de salud, los crímenes cometidos por dominicanos buscados por el FBI
El pasado mes de noviembre el Buró Federal de Investigaciones (FBI) lanzó una alerta de búsqueda contra el narcotraficante dominicano César Emilio Peralta “César el Abusador”, sin embargo este no es el único perfil de un criollo que se puede encontrar en la lista de personas buscadas por diferentes delitos.
El 14 de mayo de 2013 el FBI divulgó la búsqueda de Carlos Juan Boria, de origen dominicano, buscado por su rol en una red de tráfico en República Dominicana.
Este utilizó el alias de Ramón Valdez y está vinculado en la conspiración de distribución de 100 gramos de heroína. También sirvió como distribuidor de cocaína, heroína y crack.
De acuerdo al agente especial de la residencia del FBI en Columbus, Thomas Gill, Carlos Juan Boria fue el responsable de transportar heroína desde el área de Washington Heights en la ciudad de Nueva York hasta Columbus, Ohio.
El FBI indica que la última vez que se supo de Carlos Juan Boria fue en octubre de 2020 cuando una patrulla de Ohio encontró 17,000 dólares dentro de su carro. Su última dirección era en Columbus, donde el tráfico de drogas es uno de los más grandes problemas de la población.
Amparo Montás Hernández, conocida como Iris, y su hijo, Eddy Vásquez, trabajaron en los burdeles del suroeste de Florida con inmigrantes ilegales de América Central y del Sur.
El agente especial de la división de Tampa, James Roncinske, explicó en un audio publicado por el FBI que Iris era la encargada del burdel, y el cerebro detrás de la organización, y que presuntamente su hijo era uno de sus refuerzos.
El FBI informó a través de su portal que la madre y su hijo podrían estar en República Dominicana, y que las chicas que trabajaban en el burdel eran menores de edad o les pagaban la deuda por haber pasado la frontera estadounidense con los “coyotes”.
Un afiche divulgado con fotografías de 2005 indica que Amparo Montás tenía diferentes apodos como Iris Hernández, Iris Montás, Amparo Hernández, Ercilia Martínez, Amparo Mantis, Mandas Ambero e Iris Cáceres.
Ambos están acusados de albergar extranjeros ilegales y de viajar ilegalmente para evadir la justicia. Sus perfiles aun están colgados en la página del FBI.
Incomparecencia (fraude en los servicios de salud)
Por otro lado, el FBI mantiene en su lista de dominicanos prófugos a Daniel Guzmán, buscado por estar presuntamente vinculado en un fraude en el sistema de salud que le costó millones de dólares al Medicaid.
Guzmán habría conspirado con otros en un esquema para defraudar a Medicaid obteniendo reembolsos de manera fraudulenta del programa Medicaid por medicamentos recetados que no fueron dispensados.
De acuerdo al informe publicado por el FBI, Guzmán trabajaba en una farmacia en el área de Washington Heights del distrito de Manhattan en la ciudad de Nueva York, donde recibió recetas de beneficiarios de Medicaid y luego presentó reclamaciones de reembolso falsas al programa Medicaid solicitando el reembolso del valor total de los medicamentos recetados.
El 13 de agosto de 2008 fue arrestado con una orden de detención federal emitida por el Distrito Sur de Nueva York y puesto en libertad bajo fianza. Posteriormente, Guzmán no compareció para una cita en la corte y el Distrito Sur de Nueva York emitió una orden de arresto federal el 16 de enero de 2009. Guzmán fue acusado de no comparecer.
Los datos mostrados en el cartel de búsqueda dicen que nació el 21 de julio de 1959; nació en República Dominicana, tiene el cabello negro y los ojos color café; tiene una estatura de cinco pies cinco pulgadas (1,65 metros) y 160 libras (73 kilogramos).
El más reciente en la lista es César Emilio Peralta por quien ofrecen cien mil dólares por información sobre su paradero.
En su portal web, el FBI afirma que César Emilio Peralta Adames es buscado por alegadamente por estar vinculado con tráfico de estupefacientes entre 2007 y 2017 en países como República Dominicana, Colombia, Venezuela, Estados Unidos y Puerto Rico.
También es descrita como una persona peligrosa y que podría estar armada.
El FBI lo describe como un hombre con una estatura de 5 pies 5 pulgadas, cabello negro, ojos negros, 140 libras, dueño de un club y de habla hispana.