La República

REPORTE DE MIGRACIÓN

EEUU deportó a 710 por drogas y otros crímenes

La llegada . Según informes de la Dirección General de Migración, de los 1,725 dominicanos deportados el año pasado, 1,602 son hombres y 123 mujeres.

Estados Unidos deportó durante el año 2018 a 1,725 dominicanos por transgredir leyes estatales y federales y cumplido condenas en ese país, habiendo, entre estos 46 que cometieron asesinatos, y 664 que incurrieron en delitos de narcotráfico.

Los datos se desprenden de un informe estadístico suministrado al LISTÍN DIARIO por la Dirección General de Migración, en el que explica que, por crímenes y drogas, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos deportó a 710 criollos .

De este número total, 664 dominicanos hicieron tiempo en prisión por asuntos de narcotráfico y 46 por asesinatos en la forma y modalidad de ajuste de cuentas o venganzas por “tumbes” de droga.

De los 1,725 dominicanos deportados el año pasado, 1,602 son hombres y 123 mujeres.

Otros, según los expedientes, también purgaron condenas acusados de lavado de activos, robos, fraudes, migración ilegal, porte ilegal de armas de fuego, asaltos, documentos falsos, violaciones sexuales, retorno voluntario, trata de personas, terrorismo, violencia domésticas, secuestros y otros delitos menores.

Los meses de 2018 cuando se produjo la cantidad mayor de dominicanos deportados por Estados Unidos fueron febrero, con 157, junio 180, agosto 162, octubre 135, y noviembre 155.

Todos fueron transportados a la República Dominicana en 24 vuelos especiales, con aviones alquilados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, que aterrizaron en el aeropuerto Internacional de Las Américas, doctor José Francisco Peña Gómez.

Trataron de retornar a Estados Unidos Muchos de los deportados hicieron fueron arrestados durante intentos de entrada ilegal, a través de diversas vías, a Estados Unidos, donde han dejado negocios, esposas e hijos.

Estos lo hicieron mediante viajes como polizones en barcos mercantiles que zarpan de puertos dominnicanos y que tienen como rutas marítimas muelles de ciudades de Estados Unidos. Igualmente, compran pasaportes arreglados y viajan a México, para intentar cruzar nuevamente a través de la frontera de esa nación con Estados Unidos, hasta territorio estadounidense.

Algunos de estos expresidiarios, en su afán de regresar nuevamente a Estados Unidos, son detenidos en los aeropuertos dominicanos y otros en México y en el mismo territorio estadounidense. Las autoridades de inmigración norteamericana aplican una penalidad de cinco años de prisión a los expresidiarios deportados a sus países de origen que sean detenidos intentando volver a regresar a esa nación.

Cada 15 días las autoridades de Inmigración y Control de Aduanas, trasladan al país a un grupo de criollos que previamente han sido colocados en listas de deportación, luego de cumplir su condena en recintos carcelarios de Estados Unidos. Previo a su envió al país, estos permanecen semanas retenidos en un centro de ICE, en la ciudad de New York, hasta tanto se realizan los arreglos para su deportación.

Los expresidarios, vienen en medio de estrictas medidas de seguridad en las aeronaves que los traen de regreso, encadenados y celosamente custodiados por agentes marshall y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, de EEUU (ICE), con una funda plástica en la mano y dentro sus escasas pertenencias.

De retorno, estos son entregados por las autoridades norteamericanas a representantes de organismos de seguridad del estado de servicios en el aeropuerto Internacional de Las Américas.

Entre estos organismos se hallan la Dirección General de Migración, Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), Policía Nacional y del Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria y de la Aviación Civil (CESAC).

En tanto, que desde el aeropuerto los exconvictos son conducidos abordo del autobús a un centro de refugio de Migración ubicado en Haina, donde son depurados, fichados y entregados a sus familiares si no tienen asuntos pendientes con la justicia dominicana.

En el año 2017, según datos estadísticos de las autoridades estadounidenses, fueron repatriados 1992 expresidarios dominicanos que cumplieron condenas en territorio norteamericano por haber cometido diferentes delitos. Mientras que en el pasado 2018 esa cifra se redujo en 267, con 1,725 repatriaciones.

(+) EL RETORNO VOLUNTARIO, ENTRE LOS DEPORTADOS Se destaca que muchos dominicanos que residían de forma ilegal en Estados Unidos regresaron voluntariamente al país el pasado año con cartas de ruta, tras las nuevas medidas de migración adoptadas por la administración del presidente Donald Trump.

Usaron pasaporte provisional o carta de ruta expedida por los consulados dominicanos en las diferentes ciudades norteamericanas para venir de regreso a su país. En casos excepcionales, estos les son entregados a los nacionales que no dispongan del documento en vigor y requieran viajar a República Dominicana.

Un porcentaje importante de los viajeros que regresaron voluntariamente habrían penetrado ilegalmente a Estados Unidos, utilizando la frontera de México, con EEUU, como polizones en barcos mercantiles, viajando en yolas desde Puerto Rico.

Otros habían penetrado legalmente con visa estadounidense que dejaron cuyo plazo dejaron vencer. La mayor cantidad de los que han retornado voluntariamente ha sido desde Nueva York, Boston, California y Chicago.