La República

Nochebuena

Mabel y Felicia continúan recibiendo apoyo solidario

Felicia Félix, también beneficiada con aportes, tras el reportaje de Listín Diario y el editorial “Dos esclavas de la miseria”.

Karen Vásquez FernándezSanto Domingo

Mabel de la Cruz y Felicia Félix, las dos madres de escasos recursos pertenecientes a La Ciénega, han recibido múltiples ayudas tanto de distintas personas y entidades, en esta ocasión, fueron beneficiadas con la tarjeta de solidaridad “Comer es primero” dependiente del Programa Solidaridad otorgada por el gobierno, a personas en situación de pobreza para adquirir alimentos.

Tras el reportaje “Dos madres sin nada que comer en Nochebuena”, publicado a través de este medio, se dio a conocer la crítica situación en la que viven y la dificultad que tienen para encontrar las raciones de alimentación cada día.

Sin electrodomésticos La carencia de electrodomésticos de estas madres, conmovió al propietario de una mueblería capitalina, quien decidió aportar a esta causa, regalándole a estas madres, una licuadora, estufa y un tanque de gas y 20,000 pesos en órdenes de compra para ambas. A su vez, las mujeres expresaron su agradecimiento por las ayudas brindadas, a las personas que han aportado a su causa.

Sueñan con tener una vivienda en buen estado Sueñan con una vivienda de calidad en la que puedan protegerse del sol y la lluvia, sin embargo, sus ingresos son tan mínimos que no pueden realizarle modificaciones a sus actuales viviendas.

En la pobreza Sus viviendas están destartaladas, tienen muchos agujeros y cuando llueve el agua se entra, lo que las obliga a abandonar sus espacios para guarecerse dentro de colmados u otro lugar, hasta que pasen los torrenciales. Sus hogares apenas cuentan con colchones para los hijos.

Los pocos electrodomésticos que tienen están dañados. Las viviendas cuentan con espacios reducidos y solo les caben dos camas y un gavetero en malas condiciones y con falta de gavetas.

En ambos casos, las madres, que residen con sus hijos en un ambiente de pobreza donde nunca llega la Nochebuena, lo poco que logran conseguir de dinero lo utilizan para comprar pasta o leche en polvo, alimentos que suelen colocar en una caja cerrada para evitar que los insectos y roedores entren y los dañen.

Tal como precisó el Editorial de LISTÍN DIARIO el 24 de diciembre, se trata de “Dos esclavas de la miseria”. Cuando reporteros de este diario llegaron a esta barriada de La Ciénega, Respaldo 9, se pudo corroborar el estado crítico en que se encuentran sus casas, igual que las carencias de recursos y otros medios necesarios para vivir dignamente.

Mabel de la Cruz vive en la casita marcada con el número 53, de la calle Respaldo 9, en La Ciénega.

Por su parte, Felicia Félix vive en la casa número 14, del mismo sector. Estas pobres madres han ofrecido un número de contacto, perteneciente a su vecina, Cándida Herrera. Este es el (829) 431-1537.