Haitianos indocumentados siguen entrando en masa
Entre 200 a 300 haitianos indocumentados son apresados diariamente por miembros del Ejército de República Dominicana y, de esa cifra, entre 50 a 60 se determina que entraron al país con documentos falsos, la mayoría del Plan de Regularización de Extranjeros, informaron ayer autoridades castrenses.
La Cuarta Brigada del Ejército redobló ayer la vigilancia en los diferentes puntos de control militar establecidos en la carretera que une a Monte Cristi con Santiago, donde detectaron a numerosos haitianos que viajaban en autobuses y minibuses del transporte público con documentos alterados.
Los rigurosos chequeos establecidos por el Ejército dominicano se reforzaron aún más, debido a denuncias de que muchos haitianos tratan de ingresar al país los domingos, porque piensan que la vigilancia disminuye, dijeron oficiales militares.
Taponamientos
Grandes taponamientos se produjeron ayer en la carretera que une al Noroeste, zona fronteriza y la ciudad de Santiago, debido a los rigurosos chequeos de efectivos del Ejército.
Largas filas de vehículos se produjeron en los trayectos donde están los puestos de chequeos militares a la entrada del municipio Guayubín y en Jicomé, en las provincias Monte Cristi y Valverde, aunque en menor proporción en Hatillo Palma.
85% haitianos
Estadísticas recopiladas en la Cuarta Brigada del Ejército con asiento en Mao establecen que de 100 pasajeros que transportan al día, principalmente los domingos, los autobuses de las diferentes compañías que viajan desde y hacia la frontera Norte, Santiago y Santo Domingo, al menos 85 son haitianos y 15 dominicanos.
Estas estadísticas las comprobaron periodistas de Listín Diario al observar que pocos dominicanos viajaban a Santiago y la capital en los autobuses de las empresas de transporte público, que son al menos tres.
También la fuente militar confirmó que de esa cantidad entre 30 y 40 por ciento lo hace con carnés, pasaportes y otros documentos adulteraros, pero que son detectados por los militares y los inspectores migratorios.
5,600 apresados por mes
Solo en las provincias Valverde, Monte Cristi y Santiago Rodríguez al menos 5,600 haitianos fueron apresados en julio por soldados apostados en la zona, donde se determinó que muchos de esos inmigrantes entraron al país con documentos falsos y otros cuando caminaban por los montes se ocultaban en casas y construcciones abandonadas, según el organismo castrense.
También reveló que las cifras del mes de agosto pueden terminar igual o con un ligero aumento.
Los oficiales de inteligencia que tienen aplicaciones rápidas para detectar irregularidades migratorias, dijeron que muchos haitianos entran al país con carnés del Plan de Regularización de Extranjeros, visas, carnés de estudiantes, documentos religiosos y hasta certificados con referimientos médicos hacia hospitales dominicanos, principalmente a los de Santiago, todos falsos.
Los que entran con carnés del Plan de Regularización de Extranjeros falsos, no aparecen en el sistema. El Ejército establece también que hay 27 motocicletas retenidas, cuyos conductores se dedican al transporte de haitianos indocumentados.
INSPECTOR MIGRACIÓN AMENZA A REPORTEROS
Los periodistas del Listín Diario se trasladaron a la estación de autobuses de Expreso Liniero y Transporte del Cibao en Dajabón, cuyas unidades usan mayormente los haitianos para desplazarse a Santiago y otras partes, porque las tarifas de pasaje son más asequibles.
Un inspector de Migración que revisaba los documentos de los haitianos se molestó cuando el fotorreportero del Listín Diario comenzó a tomar imágenes.
“Tengan cuidado con lo que van hacer, yo estoy haciendo mi trabajo, déjenme trabajar”, ripostó a este periodista de una manera tajante el agente migratorio.
Los reporteros de este diario comprobaron a su vez que era normal la vigilancia establecida por miembros del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) en los puntos de Dajabón, cerca de Haití.
En algunos callejones tradicionalmente usados para el tráfico de personas, se notaba una menor presencia de soldados.