Padre Alegría dice proyecto La Barquita le cambió la vida

El padre Gregorio Alegría (padre Alegría), dijo hoy que en su vida hay dos cosas que han marcado su destino en 50 años de labor sacerdotal, una de ellas la llamada que en 2012 le hiciera el Presidente Danilo Medina para consultarlo sobre la problemática de La Barquita.

Al recordar aquel día de septiembre, un mes después de que el mandatario tomara posesión, dijo que a seis años después todavía piensa que esa fue la primera de las afamadas “visitas sorpresas” de Medina y que lo llena de regocijo ver cómo ese sueño que parecía imposible se ha convertido en una realidad.

“Apenas un mes después de que él tomó posesión, me llamó y me dijo voy a visitarte y vino, se sentó conmigo y me preguntó qué podíamos hacer con La Barquita y le expliqué que antes de plantear cualquier solución debíamos de bajar y ver esa realidad por nosotros mismos. Él aceptó y al sábado siguiente bajamos allá y planteamos esa solución”, explicó el padre Alegría mientras mostraba su visible regocijo por la obra lograda en esa empobrecida zona.

El padre Alegría habló durante un acto realizado por la Iglesia San Vicente de Paúl, donde se reconoció sus 50 años de labor sacerdotal, conjuntamente con el padre Martin Tirapu, quien también cumple ese tiempo de labor religiosa. Ambos se ordenaron en España el 23 de junio de 1968.

Alegría y Tirapu llegaron al país en octubre de 1976 luego de que en ese entonces el padre Tovar fuera allá buscando misioneros que estén a la disposición del Arzobispado de Santo Domingo.

“Yo llame a Alegría un domingo 31 de julio y le dije nos vamos para Santo Domingo de misioneros, y ahí empezó la conversación que nos trajo hasta aquí. Él está ahí sentando por mi y no lo quiere decir”, narraba Tirapu mientras compartía una sonrisa con los feligreses que allí presente.

Alegría tomó la palabra y dijo que en su vida hay dos llamadas que decidieron el resto su destino, la que Tirapu hace mención y una llamada en septiembre del 2012 del recién electo presidente, Danilo Medina.

Tanto Alegría como Tirapu llegaron a la parroquia San Vicente de Paul en Los Mina en 1980 y desde entonces se han mantenido en contacto con esta aunque sean párrocos en otros lugares.