La República

CONSTRUCCIÓN

Obispo Grullón da seguimiento a desalojados por presa Monte Grande

Santiago Benjamín de la CruzBarahona

El obispo de la diócesis de San Juan, Azua y representante del obispado de Barahona, monseñor José Dolores Grullón Estrella, manifestó que le da seguimiento a la presa múltiple de Monte Grande, para saber dónde van a ser reubicadas las familias que serán afectadas.

“Para nosotros es de gran satisfacción esta obra. Venimos desde hace mucho tiempo pidiéndole al señor que bendiga las comunidades de esta zona, y le hemos dado seguimiento a este proyecto, para saber dónde van a reubicar a nuestra gente, por el peligro que ellos tienen de ir a un lugar que no les convenga”, expresó monseñor Grullón Estrella.

Las familias de las comunidades que serán afectadas por la construcción de la presa de Monte Grande, y que tendrán que ser reubicadas, aseguraron que no saben a qué lugar van a ser llevadas, y dijeron que el censo lo realizaron hace siete años.

Monseñor Grullón Estrella bendijo el inicio de los trabajos de la presa, tras considerar la obra como un progreso para las provincias de Azua, Barahona y Bahoruco.

Precisó que es una bendición para los que han vivido toda la vida en esa zona, como La Meceta, Los Güiros y Monte Grande, para que puedan ser bien acogidos y tener un lugar mejor.

Espera que la obra sea muy beneficiosa para Barahona, y que sea una bendición para toda la región sur del país.

“Esperamos que esta obra no se pare y que así como comenzó permanezca, hasta su final”, indicó.

Wilfrido Florián, residente de toda la vida en Monte Grande, y quien será desalojado junto a su familia, expresó que el censo no le favorece, porque fue realizado hace siete años y en la actualidad todas las familias han crecido, y puso el ejemplo de la suya, que antes eran cuatro, y ahora son seis.

“En ese tiempo mi hijo mayor tenía nueve años y ahora tiene 15. En ese tiempo había adolescentes que hoy en día son padres de familia. Ahora hay nuevas casas, más familias y nuevas siembras”, manifiesta Florián.

Precisó que en ese tiempo le ofrecieron que les darían viviendas y parcelas, pero nunca le dijeron el lugar, entonces “ahora dicen el lugar del terreno y nadie sabe dónde está eso”.

“La construcción de las viviendas es en la cuarta etapa, y se supone que deben sacar a las familias de primero, porque no podemos estar con todo ese polvo y esos vehículos pesados cruzando por el área por donde hay muchos niños”, dice.

Expresa que por el polvo que hay en la actualidad, los niños que van a la escuela llegan “como si lo sacaran de un desierto donde solo hay polvo, y si seguimos así iremos directamente a la morgue”.

Marcia Méndez Encarnación, residente en Monte Grande, manifestó que su preocupación aumentó más cuando el director del INDRHI dijo que en la cuarta etapa es que construirán el proyecto donde van a ubicar a las familias que serán desalojadas.

“Me preocupó bastante porque ya el proyecto nos está impactando. Hay mucho polvillo y si seguimos así nos vamos a morir todos. Cuando él dice que las casas serán en la etapa cuatro, quiere decir que seremos los últimos en ponernos en nuestro lugar y eso no es justo”, expresó.

Consideró que no es justo, y recomendó al director del órgano público que se encarga del aprovechamiento de los recursos hídricos, Olgo Fernández, revisar las etapas del proyecto, “porque nosotros no vamos a permitir trabajos aquí sin saber para dónde vamos ni las condiciones en las que vamos a estar” concluyó.