Mueren otras dos personas intoxicadas por consumir clerén

Dos hombres murieron en Santiago al ingerir el 24 de este mes clerén. Uno de ellos fue encontrado sin vida en su cama.

Las víctimas fueron identificadas por las autoridades y organismos de socorro como Luis Tifá (Nelly) y Santo Contreras.

Tifá fue encontrado muerto en el interior de una habitación en la Pensión Fello del sector Cienfuegos, de Santiago, y de acuerdo al informe forense, este falleció por infarto al miocardio.

Juan Luis Rodríguez, hijo del fenecido conversó con el fiscal de la Unidad de Violencia Física y Homicidios, Miguel Ramos y le manifestó que su padre sufría de epilepsia y que el médico le había recomendado que no tomara bebidas alcohólicas.

Sin embargo, manifestó que la noche del 24 de este mes, su padre compró un ron casero fabricado en Haití conocido como Clerén y que tras tomarlo se acostó y fue encontrado muerto.

En tanto, Santo Contreras, fue conducido al hospital regional José María Cabral y Báez de Santiago, desde Villa Vásquez, Montecristi, luego de comprar clerén y consumirlo, comenzó a experimentar vómitos, convulsiones, dolores corporales, fiebre y mareo, según sus familiares.

Tras ser llevado a un centro de salud de su localidad, fue transferido al hospital regional Cabral y Báez de Santiago, donde falleció.

Cabe destacar, que principalmente en Santiago, el Clerén se vende en muchos colmados ubicados en barrios y sectores rurales.

La mayoría de consumidores son reparadores de zapatos y otros que se dedican a cuidar vehículos en las calles, lustrar calzados, limpiar cristales en los semáforos y también los que buscan metales y herramientas que son arrojados en los zafacones.

Los lunes y viernes, días que se celebra el mercado binacional en Dajabón, es notorio observar, principalmente a mujeres de origen haitiana ofertar diversos tipos de rones, entre ellos, el clerén, que es el más barato y el más buscado, por que quienes lo consumen dicen que es bien fuerte.

El mecánico Raúl González, dijo al Listín Diario que es capaz de prender un vehículo que se le haya terminado el combustible con una botella de clerén.