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El Banco de Piel del país sólo espera por donaciones

Costo. El acceso a piel humana de donantes fallecidos permitirá reducir el uso de piel de cerdo que es la que se usa actualmente y sale muy costosa al paciente.

Costo. El acceso a piel humana de donantes fallecidos permitirá reducir el uso de piel de cerdo que es la que se usa actualmente y sale muy costosa al paciente.

La piel de una persona que fallece puede salvar la vida de cinco niños quemados; la edad del donante no importa; la forma en que murió tampoco; si sufría del corazón o de cualquier otra enfermedad crónica no es impedimento y tampoco es requisito que al momento de fallecer esté hospitalizado.

Lo único que impide que pueda ser trasplantada temporalmente a un paciente quemado es que la persona tenga alguna enfermedad viral o de la piel. De todos modos, aunque el donante haya sido saludable, hay requisitos que obligan a realizar diversas pruebas clínicas y colocar esa piel en cuarentena antes del trasplante.

Su manejo requiere de estudios, equipos e insumos especializados y un recurso humano capacitado. El contar con piel humana para el trasplante temporal de pacientes quemados reduciría el uso de piel de cerdo, que es la que se utiliza actualmente en el país, bajando sustancialmente los costos.

Laboratorio de piel Desde hace más de dos meses, el primer y único Banco de Piel y Tejidos con que cuenta el país está listo y preparado para realizar el primer trasplante de piel humana de donante cadavérico en pacientes quemados, pero hasta ahora no ha realizado ningún caso porque no ha logrado obtener la primera donación.

El banco está instalado en la sede de la Unidad de Niños Quemados Dra. Thelma Rosario del hospital Infantil Arturo Grullón, como parte de un proyecto de investigación que desarrolla la Vicerrectoría de Investigación e Innovación de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) conjuntamente con dicha unidad, la única especializada en niños quemados con que cuenta el país.

El proyecto de investigación “Aloinjertos de piel versus xenoinjertos como predictores del tiempo de reepitelización en pacientes con quemaduras tipo AB tratados en la Unidad de Niños Quemados Dra. Thelma Rosario”, es liderado por los doctores Cinthia Núñez, investigadora principal; Renata Quintana, directora de la Unidad y coinvestigadora, y José Javier Sánchez, del área de la salud de la universidad y coinvestigador, con recursos del Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDOCyT).

Funciona bajo las regulaciones del Instituto Nacional de Coordinación de Trasplante (Incort), y desarrolla campañas particulares dirigidas a concientizar a la población sobre la importancia de la donación, así como con médicos residentes e internistas para que se involucren en la captación.

La piel El 60% de los pacientes quemados ingresados requieren injertos de piel, la cual se usa de manera transitoria para estabilizar, sin agredir, su parte sana. Permite un proceso de sanación más rápido, disminuye el dolor, reduce la pérdida de sangre, evita pérdida de proteína y por evaporación, y baja los costos porque es una donación para el paciente.

Después de un tiempo, cuando van cerrado las áreas se va retirando la cadavérica por su piel definitiva.

Las partes de piel que se utiliza para este tratamiento que garantiza menos dolor, menos riesgo de infección y más rápida recuperación, son tomadas de la espalda y de lugares no visibles, por lo que no se toca la cara ni los brazos de la persona fallecida, lo que garantiza que la imagen del cadáver no sufrirá cambios.

La piel puede usarse hasta 12 horas después del fallecimiento en pacientes ingresados y seis horas si fallece fuera de un centro de salud.

Avances Además del beneficio directo que encierra para los pacientes el contar con piel humana, la investigación abre la puerta al país en este campo, le permite evaluar la respuesta real de la población dominicana a ese tipo de injertos debido a la mezcla racial; comparar el beneficio real entre la piel de cerdo y la humana y encontrar hallazgos útiles a la ciencia.

La doctora Núñez lo define como el comienzo del futuro en el campo médico y de la investigación.

El proyecto que dio pie a ese laboratorio de piel surgió de la necesidad de contar con piel humana dada la cantidad de personas que sufren de quemaduras en el país. Se trabajó durante dos años antes de que la propuesta fuera aprobada y los entrenamientos se recibieron en Colombia.

Investigaciones Los detalles de esa y otras investigaciones que desarrolla la PUCMM fueron ofrecidos durante la visita de Listín Diario a la sede principal de la universidad y a la Unidad, por el doctor Kiero Guerra Peña, vicerrector de Investigación e Innovación; José A. González, director del Centro de Investigación y Estudios de la Religión, y Zoilo García, director de la Escuela de Psicología y coordinador del Programa de Investigación, Emociones, Salud y Ciberpsicología.

También estuvieron presentes los doctores Zaira González, directora del laboratorio de Nanobiología; Silvia Calo, coinvestigadora de dicho laboratorio; Santiago Bueno, coordinador del Programa de Investigaciones Silviculturales, Ambientales y Cambio Climático; Zahira Quiñones y Cristobalina Betamit, del área de la salud. así como los médicos que llevan a cabo la investigación del Banco de Piel.

(+) ÚNICA PARA NIÑOS La unidad de quemados funciona desde hace 12 años y cuenta con 14 camas, aunque inicialmente fue concebida para la región del Cibao se ha convertido en centro de referencia nacional y de Haití. Mantiene un promedio de ingreso de ocho a 10 pacientes semanales entre recién nacidos y los 18 años.

En atenciones ambulatorias recibe entre 20 y 25 pacientes semanales, entre 1,000 y 1,200 consultas por año y más de 200 ingresos. Su demanda aumenta en los períodos de vacaciones escolares cuando los niños están en la casa y ocurren más incidentes en el hogar.

El 20% de los pacientes llegan desde Haití y hay semanas en que de cada 10 pacientes ocho son haitianos. “Con ellos se nos incrementa el día cama porque al no vivir en el país se prefiere esperar la curación total antes de darle el alta”, explica la directora.

Un sólo injerto de piel de cerdo cuesta 12,000 pesos. El promedio de consumo de un paciente con menos del 15% de superficie corporal quemada es de 900 mil pesos y superior a ese porcentaje puede consumir entre 1.9 y dos millones de pesos.

La mayoría de los pacientes que se reciben son menores de cinco años y las principales causas de quemaduras son por líquidos calientes, como café, habichuela, avena; seguido de electricidad que ocupa un 24% de los ingresos, y en tercer lugar por fuego en la casa, en el carro, entre otros.

Los pacientes quemados son cubiertos por la unidad y el único gasto de bolsillo que hacen es la transfusión sanguínea que necesiten y la piel de cerdo, que no es cubierta por las ARS.

Aporte. La piel humana permitirá la reducción de la ocupación día-cama en la Unidad de Quemados, así como el uso de antibióticos.

Detalles. La doctora Renata Quintana, directora de la Unidad, ofrece explicaciones de su funcionamiento a la periodista Doris Pantaleón.

El banco está instalado en la sede de la Unidad de Niños Quemados Dra. Thelma Rosario del hospital Infantil Arturo Grullón de Santiago.

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