PELIGRO
Polizón: cuatro historias de la hazaña de arriesgar la vida “detrás de un sueño”
Salir detrás del “sueño americano” o vivir en otro país para “no morir ciego”, así rezan dos dichos populares en los que se escudan muchos dominicanos que se lanzan en la aventura de abandonar su tierra utilizando diversas vías, muchas de ella poniendo en riesgo sus vidas.
Irse de polizón en un avión, por ejemplo, ha sido uno de los actos más riesgosos que se han visto en el país por las condiciones en las que han llegado muchos a su destino soñado.
LISTÍN DIARIO ha recopilado los casos que se han registrado de 2008 a 2017.
El más reciente es el de Siomi Santos, el joven de 26 años de edad que llegó a Miami en el compartimiento del tren de aterrizaje de un avión y luego fue devuelto al país por las autoridades estadounidenses.
Santos llegó a la ciudad de Miami con un pasaporte falso, de nacionalidad jamaiquina e intentó engañar a los oficiales de migración del aeropuerto.
En septiembre de 2014, Josué Jiménez fue apresado por las autoridades federales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos en el aeropuerto John F. Kennedy, luego de burlar los controles de seguridad del Aeropuerto Internacional de Las Américas José Francisco Peña Gómez.
Según el informe, Jiménez, de 26 años, en ese momento laboraba en el área de transporte a personas minusválidas y para realizar la maniobra se introdujo en la bodega de maletas del avión de Jetblue que hacía el vuelo 310 con destino a Nueva York.
Luego de un interrogatorio que duró varias horas para detectar si era parte de alguna red de trata de personas, Jiménez fue deportado al país en un vuelo de la misma aerolínea.
Un año y dos meses antes las autoridades del Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria de la Aviación Civil (Cesac) frustraron los planes de José Manuel Suero Alcántara, de 22 años, cuando lo detectaron en el compartimiento del tren de aterrizaje de un vuelo que saldría a Madrid, España, la noche del 11 de noviembre de 2013.
Suero Alcántara declaró que saltó la verja perimetral que cubre el aeropuerto, hasta llegar a la rampa donde estaba estacionada la aeronave.
Por el hecho fue juzgado por la fiscalía de la provincia Santo Domingo bajo el cargo de interferencia ilícita de aviación.
Sin embargo, en 2010 para un joven de 22 años la hazaña como polizón, esta vez terminó en tragedia.
El hombre, que no fue identificado porque no portaba documentos, cayó de la aeronave matrícula N-467-UP, propiedad de la compañía UPS, que viajaría a la ciudad de Miami.
Las autoridades reportaron que el desconocido se introdujo en el compartimiento y que al despegar el tren de aterrizaje no cerró por completo, provocando su caída.
Félix Joseph Gruosso, aparentemente no se percató de la situación y cuando nueva vez se abrió el compartimiento para cerrarlo correctamente, cayó.
Proyecto de ley sobre polizón
En 2008 en el país se creó un proyecto de ley que buscaba sancionar la práctica de polizón, pero no prosperó.
En el artículo tres del proyecto queda estipulado que en caso de ocurrir muerte del polizón, siempre y cuando no se compruebe la vinculación de la tripulación u operadores de la nave, esta se considera una falta esclusita de la víctima.
El artículo 4 establece que las penas irían de seis meses a dos años de prisión y una multa no menor de cinco a 20 salarios mínimos a quien sea declarado autor del delito.
Si una persona es descubierta en alguna de las áreas restringidas del aeropuerto sin que pueda explicar los motivos, será considerado una tentativa de polizón, la cual también seria sancionada.
La complicidad, la promoción, inducción, financiamiento o transporte de polizones también es sancionada en este proyecto de ley, basados en la Ley 137-03 sobre Tráfico Ilícito de Migrantes y Trata de Personas.
En tanto que el intercambio de información, desarrollo de políticas, programas y proyectos con el propósito de combatir el delito, son algunas de las medidas que podrán tomar las autoridades de seguridad portuaria para reforzar la seguridad.