RECHAZAN VEDA DE HAITÍ

Aumenta tensión en Dajabón y Pedernales

PROTESTAS VIOLENTAS Y BLOQUEO SIGUEN EN LA FRONTERA

Incidentes. Protestas violentas se produjeron ayer en el poblado haitinao de Anse-à-Pitre, debido a la veda impuesta por Haití.

Incidentes. Protestas violentas se produjeron ayer en el poblado haitinao de Anse-à-Pitre, debido a la veda impuesta por Haití.

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Odalis Báez / Ricardo Santana / William EstévezSanto Domingo

La tensión en la frontera dominico-haitiana aumentó ayer debido a la veda impuesta por Haití a 23 productos de República Dominicana.

Un disturbio con piedras y disparos de armas de fuego se originó en el poblado haitiano de Anse-à-Pitre próximo a la frontera con Pedernales, tras las represalia de autoridades del vecino país cuando intentaban despojar a sus nacionales que traslaban productos a su territorio del comercio binacional celebrado entre ambas partes.

Los participantes en el enfrentamiento apedrearon las instalaciones de la aduana de su país e incendiaron neumáticos frente a la edificación, en protesta por la acción de las autoridades haitianas.

Motoconchistas que transportaban las mercancías y productos comprados en el mercado binacional y haitianos que fueron despoja- dos por las autoridades de su país, en busca de hace cumplir la medida impuesta por su gobierno, dijeron que no están en condiciones de aceptar la acción, alegando que se morirían de hambre, pese a la corta distancia entre Pedernales y el poblado de Anse-à-Pitre.

Mientras que en Dajabón nuevamente fracasó el mercado bilateral, debido al bloqueo que mantienen comerciantes y transportistas dominicanos en contra de la medida del gobierno de Haití.

Igual ocurrió el domingo, cuando se celebraba la feria común y civiles dominicanos impidieron la entrada a este país de haitianos, incluidos los que tenían documentos.

Del lado de Haití, haitianos hacían lo mismo.

También algunos ciudadanos recorrían calles y comunidades de Dajabón en busca de haitianos que logran cruzar la frontera de manera clandestina y tras atraparlos sin maltratarlos, se los entregaban a las autoridades para la repatriación a su país de origen.

Los comerciantes y conductores de patanas y camiones, reiteraron que como Haití no permite que “nada, ni nadie entre a su país desde República Dominicana, tampoco ellos, permitirán que, “nada ni nadie, entre a nuestro territorio desde la vecina nación”.

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