Centroamericanos y RD abren cumbre en San Salvador para relanzar integración 

Gobernantes de Centroamérica y República Dominicana, junto a responsables del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo, abrieron este martes una cumbre extraordinaria en San Salvador para relanzar el proceso de integración. La cumbre, que se efectúa en un hotel de San Salvador bajo estrictas medidas de seguridad, fue inaugurada hacia el mediodía por el presidente anfitrión Mauricio Funes y culminaría por la tarde. "En las últimas cinco décadas han persistido problemas estructurales que no han permitido el avance de la integración, pero también la integración no ha avanzado pues no ha habido un seguimiento de los acuerdos alcanzados, por tanto es el momento de redefinir nuestras prioridades", afirmó Funes en el discurso de apertura de la cumbre. El gobernante salvadoreño llamó a los líderes de Centroamérica a "dejar definitivamente atrás" la concepción de que el istmo es "un mero satélite de otras potencias" y les demandó "tomar la responsabilidad" de avanzar en la integración y en la toma de decisiones para resolver los problemas. "Necesitamos asumir un renovado compromiso con la integración regional, con la plena conciencia de que lo hacemos a partir de una nueva etapa histórica del mundo y de la región", agregó Funes. A la cumbre asistieron los presidentes Alvaro Colom (Guatemala), Laura Chinchilla (Costa Rica), Porfirio Lobo (Honduras), Ricardo Martinelli (Panamá), además del vicepresidente dominicano Rafael Alburquerque y el viceprimer ministro de Belice, Gaspar Vega. También acudieron los presidentes del Banco Mundial (BM), Robert Zoellick y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Felipe Moreno, además del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza. Nicaragua es el gran ausente de la reunión pues no acudió ningún representante del gobierno de Daniel Ortega, que no reconoce a Lobo, por haber sido elegido en comicios efectuados bajo el gobierno de facto que dirigió a Honduras durante siete meses luego del golpe. Funes dijo que los mandatarios han "adoptado" un manifiesto en la cita, que plantea que "la agenda de la nueva integración centroamericana tiene que construirse a partir de la identificación de las similitudes, pero también de las diferencias económicas, sociales, políticas y culturales que existen". El manifiesto señala que la integración debe darse con el "reconocimiento explícito de la existencia de los intereses y prioridades nacionales diversas y, en algunos casos, contrapuestas", indicó Funes. Agregó que el istmo debe de trabajar en forma conjunta contra problemas como el narcotráfico, la inseguridad, las desigualdades sociales y la pobreza, pues la región centroamericana es la "más injusta" pues existen "las brechas más escandalosas entre los muchos pobres y los pocos ricos". Al margen de la cumbre los gobernantes recibirán a Insulza, quien tramita el retorno de Honduras al ente hemisférico, del que fue marginado tras el golpe de junio de 2009. Los temas que serán discutidos son: seguridad regional, política social, integración económica, la prevención de desastres y lucha contra el cambio climático, y la institucionalidad. La cumbre extraordinaria concluirá este martes por la tarde con la firma de una declaración conjunta y una rueda de prensa.