Nuncio aclara posición del Papa sobre el aborto

La Nunciatura Apostólica en la República Dominicana, con referencia al artículo del periódico “Listín Diario” intitulado: “Roma clarifica visión con respecto al aborto”, del domingo 22 del corriente mes, publica el texto integral del discurso del Santo Padre Benedicto XVI, durante el encuentro en Luanda (Angola) con las autoridades políticas y civiles y con el cuerpo diplomático, el viernes 20 del corriente mes, sobre el tema del aborto provocado. “Amigos, quiero concluir mi reflexión confesando que mi visita a Camerún y Angola está despertando en mí profunda alegría humana que se siente al encontrarme entre familias. Pienso que dicha experiencia es el don común que África ofrece a los que vienen de otros continentes y llegan aquí, donde “la familia representa el pilar sobre el cual está construido el edificio de la sociedad” (Ecclesia in África, 80). Y, sin embargo, como todos sabemos, también aquí la familia está sometida a muchas presiones: angustia y humillación causada por la pobreza, el desempleo, la enfermedad y el exilio, por mencionar sólo algunos. Es particularmente inquietante el yugo oprimente de la discriminación sobre mujeres y niñas, por no hablar de la práctica incalificable de la violencia y explotación sexual, que provoca tantas humillaciones y traumas. También he de subrayar otro aspecto muy preocupante: las políticas de aquellos que, con espejismo de hacer avanzar la “edificación social”, minan sus propios fundamentos. Qué amarga es la ironía de aquéllos que promueven el aborto como una cura de la salud “materna”. Qué desconcertante resulta la tesis de aquéllos para quienes la supresión de la vida sería una cuestión de salud reproductiva”(cf.Protocolo de Maputo, art.14). Este artículo 14 (c) de dicho Protocolo, cuestionado por el Santo Padre, plantea: “Los Estados Partes velarán por que el derecho a la salud de la mujer, incluida la salud sexual y reproductiva, es respetada y promovida. Esto incluye:... proteger los derechos reproductivos de las mujeres autorizando el aborto médico en caso de asalto sexual, violación, incesto y cuando la continuación del embarazo constituya peligro para la salud física y mental de la madre o la vida de la madre o el feto”. La doctrina de la Iglesia sobre el aborto permanece invariable y puede ser encontrada en el “Catecismo de la Iglesia Católica”. “La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida (art. 2270). Desde el siglo primero, la Iglesia ha afirmado la malicia moral de todo aborto provocado. Esta enseñanza no ha cambiado; permanece invariable. El aborto directo, es decir, querido como un fin o como un medio, es gravemente contrario a la ley moral” (art.2271).