The Bear tendrá tercera temporada
Actualmente, la primera temporada está nominada a 13 premios Emmy, que incluyen el premio a la mejor serie de comedia.
Los fuegos de las cocinas de The Bear volverán a arder una temporada más. Disney+ ha anunciado que la serie creada por Christopher Storer y protagonizada por Jeremy Allen White y Ayo Edebiri tendrá tercera temporada. Las dos primeras temporadas están disponibles en el servicio de streaming
""The Bear", que cautivó al público en su primera temporada y que triunfó aún más en su segunda, se ha convertido en todo un fenómeno cultural", ha declarado Nick Grad, presidente de FX Entertainment en un comunicado.
"Estamos muy orgullosos de asociarnos con Christopher Storer, Joanna Calo, Josh Senior y el resto del equipo creativo, así como con el reparto encabezado por Jeremy Allen White, Ayo Edebiri y Ebon Moss-Bachrach. Lo que han conseguido tanto ellos como el equipo técnico es algo realmente extraordinario y nosotros, nuestros socios de Hulu y Disney+ estamos ansiosos por ver el próximo capítulo de la historia de The Bear", concluye
Actualmente, la primera temporada está nominada a 13 premios Emmy, que incluyen el premio a la mejor serie de comedia, nominaciones a las interpretaciones de Jeremy Allen White, Ebon Moss-Bachrach, Ayo Edebiri, Jon Bernthal y Oliver Platt, junto con nominaciones al mejor guion, dirección, reparto, diseño de producción, montaje, edición de sonido y mezclas de sonido.
La ficción también fue elegida entre las mejores series de TV del año por el AFI en su primera temporada y acumuló numerosos premios, incluidos un premio WGA, un premio PGA, un premio Film Independent Spirit, un premio American Cinema Editors y un premio ACE Eddie. Además, Jeremy Allen White ganó el Globo de Oro, el SAG, el TCA y el Critics Choice como actor principal en una serie de comedia.
La segunda temporada de The Bear relata cómo Carmen 'Carmy' Berzatto (Jeremy Allen White), Sydney Adamu (Ayo Edebiri) y Richard 'Richie' Jerimovich (Ebon Moss-Bachrach) trabajan para transformar su ruinoso restaurante de bocadillos en un local de más nivel.
Mientras reforman el restaurante de arriba a abajo, el equipo también emprenderá sus propios viajes internos en los que cada uno de ellos se verá obligado a enfrentarse a su pasado y decidir quiénes quieren ser en el futuro. Sin embargo, resulta que lo único más complicado que gestionar un restaurante es abrir uno nuevo. El equipo tendrá que enfrentarse a la pesada burocracia que implican los permisos y los proveedores; y la belleza y el caos creativo que supone la planificación de los menús.
Esta transición también aportará un nuevo enfoque sobre el negocio de la restauración y la nueva situación obligará a todo el personal a adaptarse a nuevas formas de colaboración y adquirir nuevas habilidades. Tendrán que superar los límites de sus capacidades y de sus relaciones, aprendiendo lo que significa estar al servicio de los demás: tanto en lo que se refiere a los clientes como entre ellos.