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Ana María Arias previo a su muerte: “Jesús está ahí, Él me ha cuidado sobre todas las cosas"

Madre de dos hijos, Marcos y César, ya casados, la fenecida actriz decía no necesitar compañía o pareja para disfrutar de la vida

La actriz Ana María Arias murió el lunes 21 de agosto 2023.

Ana María Arias en una escena de sus recientes películas. La actriz murió el lunes 21 de agosto 2023.

Hace un año la actriz Ana María Arias conversaba, en una entretenida entrevista, en el canal de YouTube del humorista Félix Peña, en la que irónicamente recordaban a amigos y compañeros del arte que habían fallecido.

El tema, recurrente durante toda la conversación, hizo que la actriz, quien murió el lunes a los 71 años, expresara sobre su posible deceso. “Que el Señor me de la vida hasta que Dios Quiera. Voy a llegar hasta cuando Él decidas… El Señor, todopoderoso, me ama y me tiene aquí con algún propósito”, se refirió al tocar el tema de su salud.

Arias, graduada de Bellas Artes desde los años 60, que en la última etapa de su vida era una de las actrices más cotizadas del cine dominicano, confesó ser muy creyente de Dios. Madre de dos hijos, Marcos y César, ya casados, decía no necesitar compañía o pareja para disfrutar de la vida.

“Jesús está ahí, Él me ha cuidado sobre todas las cosas, mucho más ahora que no tengo compañía física, Él me va cuidar igual; ahora más que estoy sola”.

Se reía de la gente que le cuestionaba su estilo de vida, y es que era usual verla tomar sus tragos de alcohol en un colmado y también buscando a Dios en una iglesia. “La fe no tiene nada que ver con lo que tu hagas. Creo en Dios sobre todas las cosas”, le dijo entre risas a Félix Peña.

Una vida que vivió sin temores y a su manera. Sobre las dos parejas que tuvo, contó que nunca cocinó, ni lavó, y planchó para ellos, pues la relación se llevó a cabo cada quien viviendo su casa y compartiendo el fin de semana.

Aunque no hizo una gran fortuna en el arte, en la última etapa confesó haber ganado buen dinero en el cine local, habiendo participado en más de 14 películas, según ella dinero que se disfrutó “montando muchos barcos y muchos aviones”, es decir que en los último años tuvo la oportunidad de viajar y conocer diferentes países.

En el arte

Tuvo una carrera de más de 50 años la actriz se destacó en el cine, teatro, trabajó en la radio y televisión dejando una marca distintiva por su autenticidad y fuerte carácter.

En 1966 tuvo su gran oportunidad en el teatro al personificar a un cura español, para el personaje se cortó el pelo y su actuación fue tan destacable que llamó la atención de Freddy Beras Goico y Cuquín Victoria para que formara parte del programa “Nosotros a los ocho”, uno de los primeros espacios televisivos de variedades y entretenimiento.

En la radio fue parte de un programa en Radio Universal, en el que se relataban los sucesos policiacos y luego pasó a sustituir al periodista Joseph Cáceres en el afamado programa radial “De todo un poco”, del periodista Mundito Espinal, en 1975. Aquí Ana María tenía el segmento de comentar los chismes más picantes de la farándula y fue precisamente cuando se pegó popularmente, por su manera directa de decir las cosas.

El periodista Joseph Cáceres recuerda el hecho porque salió del programa para ser, entonces, la competencia de Mundito con un “Arte Nacional en Radio”, Ana María se convirtió en su rival por la competencia que ejercía con los programas.

“Nuestro trabajo provocó una especie de rivalidad, pero fue bien manejada Ana María y yo fuimos muy buenos amigos, nos juntábamos en la discoteca, compartimos, cultivamos una amistad, y coincidimos trabajando en varios programas de televisión como La Alegría del País, Nosotros a las ocho y Cuánto vale el Show”, recuerda Cáceres.

Marcó la diferencia

La década de los 80 trajo muchas novedades en la televisión dominicana. La productora venezolana Prolater replicó el programa “¿Cuánto vale el show?”, el cual era conducido por Johnny Ventura, los martes y jueves, en el horario estelar de las ocho de la noche, por Rahintel, en ese entonces canales 7 y 11.

Era un reality show en busca de talentos y el jurado estuvo compuesto por Joseph Cáceres, Teodoro Escaño, los actores Josefina Gallart y Niní Germán, y por supuesto, Ana María Arias. Cada jurado con sus particulares características, las de Ana María resaltaban por emitir sus opiniones directas, a veces hirientes, pero siempre bajo el marco de la realidad.

En este espacio ganaba 600 pesos y su imagen explotó de tal forma que en todo el país se hablaba de su trabajo, ganando el respeto de la prensa, que destacó siempre su trabajo haciendo entrevistas para los diarios.

“Varias críticas se le han formulado a Ana María Arias en el gustado programa ¿Cuánto vale el show? sin embargo, la controversial mujer de la farándula ha realizado correctamente su papel y la mejor demostración es que ella se convierte en la atracción principal”, publicó el desaparecido vespertino Última Hora, en septiembre de 1983.

La prensa también informaba sobre la rivalidad que existía entre Josefina Gallart y Ana María, la que ambas desmintieron, constantemente, explicando que simplemente se trataba de actuaciones en el programa.

Pero la gente no quería al personaje, que en algunos aspectos tenía que ver con la personalidad de la actriz, ya que también fue una mujer directa y de carácter fuerte, pero muy querida por sus amigos y conocidos.

“Me tomé el personaje muy en serio y me busqué muchos problemas, todavía la gente me reclama”, recordó la actriz.

Fue tanta la incidencia que tuvo su personaje en “Cuanto vale el show” que en una ocasión se desmontó de su vehículo porque se le pinchó un neumático y cuando trató de pedir ayuda, la gente le lanzó piedras y tuvo que intervenir la policía. En otra ocasión el guardaespaldas de Johnny Ventura tuvo que protegerla de que los hijos de un señor no la agredieran, luego que esta le dijera que estaba muy viejo para querer ser artista.

Con el cuchillo en la boca

Tan aguerrida como su personaje así asumió Ana María una etapa de su vida. Cuando concluyó su contrato en “¿Cuánto vale el show?” se quedó sin trabajo y no se inmutó en decir a la prensa que era madre divorciada con dos niños y que necesitaba trabajar.

En esta época incursionó en los negocios y abrió “El bar de Ana María”, muy concurrido por sus amigos, quienes según Joseph Cáceres llevaron el negocio a la quiebra debido a los intercambios y la falta de pagos de los parroquianos.

Sin trabajo llegó a montar un carrito de “hot dog”. “No le tuvo miedo al trabajo ahí la vimos vendiendo hot dog para llevar el pan a su casa”, recordó Cáceres.

En la conversación que tuvo con su amigo Félix Peña en el canal de YouTube del comediante, confesó haber sobrevivido al cáncer en dos oportunidades, es a raíz de esta situación que es pensionada con 30 mil pesos.

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