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María Celeste Arrarás estrena novio a los 62 años

La periodista puertorriqueña dijo que los fracasos en el amor no endurecen su corazón y que es ingenua cada vez que se enamora.

María Celeste Arrarás, presentadora de noticias foto: iNSTAGRAM

listín diarioSanto Domingo, RD

María Celeste Arrarás siempre se ha limitado a la hora de hablar de sus relaciones, pero no por falta de amores, pues la presentadora de noticias confesó ser “muy afortunada en el amor”. Aunque recientemente hizo una excepción en una entrevista para el canal de YouTube de su amiga y colega Neida Sandoval, donde reveló que tiene novio.

La periodista puertorriqueña, de 62 años, dijo que los fracasos en el amor no endurecen su corazón y que es ingenua, “una tonta colegiala” y “un bomboncito cuando estoy enamorada”, a pesar de su carácter.

“Siempre me he sentido que sin amor es muy difícil ser completamente feliz porque la soledad es tremenda”

María Celeste ArrarásPeriodista

En ese sentido, la exconductora de Al Rojo Vivo definió al ser humano como un “animal de compañía”, por lo que siempre opta por estar rodeada de sus hijos, Lara Giuiliana, Julián y Adrián (ruso), este último adoptado, y de su perro Archie, además respondió sobre la existencia de un compañero especial.

“Sí, hay siempre candidatos por ahí. Uno en particular", mencionó con una sonrisa.

Una de las escasas declaraciones de Arrarás sobre su vida sentimental fue en abril de 2004, cuando anunció, a través de la revista People en Español, su separación del abogado Manny Arvesú, con quien se casó en 1996 y procreó dos hijos y adoptó uno en Moscú, Rusia.

En 2005, Arrarás vivió un mediático proceso de divorcio cuando se exesposo decidió exigirle una pensión para mantener el estilo de vida que acostumbraba a tener durante los 8 años del matrimonio.

En diciembre de 2021, Arrarás retomó el tema de su ruptura con Arvesú y contó que éste la dejó un 25 de diciembre para irse con otra mujer y regresó para fin de año a recoger su ropa interior e irse de fiesta con su nueva conquista, razón por la cual no celebra fin de año, contrario al Año Nuevo que volvió una tradición festejarlo en grande.

“Podría decirles como excusa que ese último día del año me recuerda cuando el padre de mis hijos me dejó en plena Navidad por otra mujer y regresó a casa el 31 de diciembre”, dijo la veterana comunicadora a Hola! USA.

“Fue una despedida de año negra, pero encontré confort metiendo a mis tres hijos a mi cama, que para ese entonces todos usaban pañales… ¡y hasta mis perros acabaron acurrucados con nosotros! Apague las luces y mi cuarto solo quedó iluminado por la pantalla del televisor. Así vi caer la bola de Times Square”, añadió.

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