La obra del escultor italiano Bartolini, más accesible por la digitalización
El material del archivo llegó a la Galería en dos donaciones efectuadas en 2011 y 2013
La obra del italiano Lorenzo Bartolini, uno de los escultores neoclásicos más importantes del siglo XIX, así como su correspondencia personal y otros documentos son accesibles al público desde hoy en internet, gracias a la digitalización del archivo que se encuentra en el recién renovado instituto de arte Gipsoteca, de la Galería de la Academia de Florencia (norte de Italia).
"El proyecto de digitalización de archivos nos permite mejorar aún más toda la obra de Bartolini", señaló Cecilie Hollberg, directora de la Academia de Florencia, entidad que ha llevado a cabo esta digitalización desde 2020 y que es posible ver en el sitio web de la Galería.
Hollberg indicó, en un comunicado, que esta colección online, que muestra no solo las obras, sino también otros muchos aspectos de la vida del artista, "está disponible para estudiosos y para cualquier persona interesada en conocer a Lorenzo Bartolini y profundizar en su historia artística y personal".
Tal y como subrayó el Ministerio de Cultura de Italia, la digitalización del archivo de Bartolini (1777-1850), se ha convertido en "necesaria" después de "la crisis sanitaria y el consecuente cierre de museos y lugares de cultura".
El material del archivo llegó a la Galería en dos donaciones efectuadas en 2011 y 2013 por la fundación sin ánimo de lucro "Amigos de Florencia" y la Asociación "Amigos del Museo de Instrumentos Musicales".
Adquirida por los herederos de Paolina Napoleone, una de las tres hijas del escultor, toda la documentación fue cuidadosamente reorganizada e inventariada en 2014.
En su totalidad se trata de una colección dividida en nueve series, dentro de las cuales se incluye correspondencia personal y comercial, así como la relativa al encargo de obra, además de actas, documentos legales y contables, cuadernos con dibujos y material impreso.
Además de las cartas, que van desde 1810 hasta 1850, año de la muerte del escultor, hay documentación posterior, fechada hasta 1935, que plasma hechos relacionados con cuestiones hereditarias y que incluye unos 12.800 documentos escritos a mano, así como unas 870 páginas de material impreso, en su mayoría del siglo XIX, generando más de 24.000 escaneos gracias a la digitalización.