Depp golpeó en la cara repetidamente a Amber Heard, según la hermana de ella
El 11 de abril comenzó esta segunda batalla legal entre Depp y Heard, por la que el actor la acusa de difamación y le exige una compensación de 50 millones de dólares
Whitney Henriquez, hermana de Amber Heard, declaró este miércoles que fue testigo de cómo Johnny Depp golpeó repetidamente en la cara a la actriz durante una discusión ocurrida en el ático de la entonces pareja en marzo de 2015.
Henríquez corroboró así la versión de su hermana ante la corte de Fairfax (Virginia, EE.UU.), en la que se está dirimiendo la demanda por difamación que Depp interpuso contra Heard.
Según el relato de Henríquez, el actor se peleó aquel día con Heard, ambos se gritaron y, además de golpear a su expareja, también la agredió a ella.
"No le pegues a mi jodida hermana". Así defendió Heard a Henríquez, según esta última, quien añadió que el guardia de seguridad tuvo que separarlos mientras Depp las llamaba "malditas putas".
Depp se había pronunciado previamente durante este litigio sobre el "incidente de la escalera", como ya lo conocen quienes han seguido el caso.
En su versión, eludió hablar sobre si golpeó a las hermanas y afirmó que él fue la "verdadera víctima" de una agresión que le dejó la cara magullada.
Posteriormente, Travis McGivern, el guardia de seguridad, dio un testimonio que coincidía con la narración de los hechos que proporcionó Depp.
Por su parte, Heard ya declaró en este juicio que ese día golpeó a Depp para proteger a su hermana, pero que él la agarró por la parte posterior de la cabeza e impactó repetidamente contra su cara.
Este episodio fue analizado también en el anterior pleito por difamación que ya mantuvo la expareja en Reino Unido durante el año 2020.
Entonces, Henríquez testificó lo mismo y el juez acabó dictaminando que Depp, en esa ocasión así como en muchas otras, agredió a Heard.
El 11 de abril comenzó esta segunda batalla legal entre Depp y Heard, por la que el actor la acusa de difamación y le exige una compensación de 50 millones de dólares debido a un artículo que ella publicó en el diario The Washington Post en 2018, después de su divorcio, en el que aseguraba haber sufrido “abuso doméstico”.