Entretenimiento

Kanye West, mendigo de amor, involucra a Dios en la recuperación de Kim Kardashian

"Necesito volver a casa y estar con mis hijos", afirma el rapero

Kanye West y Kim Kardashian pusieron fin, en febrero, a un matrimonio de seis años entre dos de las estrellas más importantes del siglo. (Foto: AP/Archivo).

Redacción de EntretenimientoSanto Domingo. RD

Kanye West da lo que sea porque Kim Kardashian le haga caso de nuevo. Hasta a Dios comprometió en la misión.

“Dios traerá de vuelta” a su esposa, exclamó el rapero estadounidense durante un discurso con alto parlante que se hizo viral en las redes y que pronunció en la iglesia cristiana Mission de Los Ángeles.

"La narrativa que Dios quiere ver es que todos podamos redimirnos con estas relaciones", comentó durante sus palabras pronunciadas el jueves, Día de Acción de Gracias.

El rapero admitió que falló en la relación: “En muchas relaciones uno comete errores, yo cometí errores”, expresó, y aseguró que pretende subsanar si su todavía esposa le da una segunda oportunidad.

Ya hace un mes él había expresado algo parecido: "Todo esto no es una broma para mí. Mis hijos quieren que sus padres sigan juntos. Yo quiero que estemos juntos".

Sin embargo, desde hace una semana, a la influencer se le relaciona con el comediante Pete Davidson, con quien se le ha visto juntos con indicadores de que son novios.

La farándula americana relacionó a Kanye con Irina Shayk, un romance que al parecer no funcionó o no fue real.

Aunque se dio a conocer que en febrero pasado se divorciaron, el intérprete aseguró hace poco que "yo ni siquiera he visto los papeles del divorcio, no nos hemos divorciado".

+ Antecedentes

En febrero, tras meses de constantes rumores la celebrity pidió formalmente el divorcio al rapero, poniendo final así a un matrimonio de seis años entre dos de las estrellas más importantes del siglo.

El impacto de la noticia en Estados Unidos, un país sin realeza pero propenso a tratar a sus celebridades como si lo fueran, es similar al que tuvo en su día la ruptura entre Brad Pitt y Angelina Jolie con una diferencia: ellos pertenecían a la élite de Hollywood mientras que Kim y Kanye eran los reyes de las redes sociales.

Hasta entonces ninguna pareja había estado tan expuesta. El modelo tradicional de rentabilizar una unión entre dos estrellas se basaba en apariciones públicas estudiadas, fotografías robadas por los "paparazzi" y alguna exclusiva pactada.

Pero Kim Kardashian, de 41 años, encontró en Instagram una mina que explotar para compartir directamente sus momentos familiares, ya fuera una de sus primeras cenas románticas, la foto en el espejo del baño mostrando su embarazo o un vídeo tras ser víctima de un robo.

+ Unión de dos astros

En pleno 2012, la unión del músico y la estrella del clan Kardashian era perfecta para la cultura popular.

Por un lado, ella era la "influencer" por antonomasia, ejemplo a seguir para toda una generación de famosos surgidos en las redes sociales.

Aprendió de la primera "famosa por el hecho de ser famosa": Paris Hilton. Y tras años como su asistente, la filtración de un vídeo sexual y el estreno de un "reality show" familiar pusieron su nombre en el mapa.

La fama de Kanye West, de 44 años, en cambio, era más convencional. Está considerado uno de los raperos más importantes de la historia gracias a discos como "My Beautiful Dark Twisted Fantasy" (2010) o "Yeezus" (2013), pero sus polémicas terminaron por eclipsar la imagen de músico de culto.

+ Amor explotado en las redes

Mucho antes de que fueran novios, Kim y Kanye ya explotaban hasta sus primeros coqueteos. En el reality "Kourtney & Kim Take New York" se notaba la química entre el rapero y la famosa, que insistían en que lo suyo era una amistad.

En realidad se conocían desde 2003, cuando coincidieron en una sesión de grabación (ella salía con un productor) y él quedó prendado de ella.

Lo que entró por los ojos no entró por las letras. Kanye no sabía muy bien quien era y se refería a ella como "Kim Kardajan" y "Kim Kar-dijon".

A partir del 2012 se aprendió el apellido y comenzaron a dejarse ver en pasarelas de moda, partidos de la NBA y alfombras rojas de premios. El público había asistido a la colisión de dos astros mediáticos. Documentada a diario.

+ Bebé y boda

Si faltaba morbo a su historia de amor, se encargaron de incluirlo. En junio de 2013 la pareja anunciaba que esperaban su primera hija, llamada North West en un alarde de creatividad, justo un día antes de que ella terminara su divorcio de Kris Humphries (72 días de casados y casi 20 meses de ruptura).

Entonces llegó la boda. Por todo lo alto. Una prefiesta en el Palacio de Versalles (Francia) y el enlace en el Forte di Belvedere de Florencia (Italia).

Fue el evento farandulero del año. Steve McQueen, David Blaine, Serena Williams, John Legend y Jaden Smith destacaban en la lista de invitados. Lana del Rey y Andrea Bocelli se encargaron de la música. Pero el plan no convenció a la pareja "rival": Beyoncé y Jay-Z.

Todos los asistentes firmaron un compromiso de confidencialidad. No se podía reventar la exclusiva de una familia que ha hecho una fortuna de 2.000 millones de dólares a base de vender su vida en todos los formatos.

+ Enemistad y primera crisis

Como grandes gestores del negocio de la fama, el matrimonio tuvo que encontrar un nuevo filón que explotar.

Kim se unió a su marido en una adictiva guerra abierta con la cantante superventas de la década, Taylor Swift, que ocupó infinidad de titulares en 2016 por un rap en el que él llamaba a Swift "zorra", supuestamente con su aprobación. Oro puro para la cultura pop.

Ese año, durante la Semana de la Moda de París, ella fue maniatada en su habitación de hotel y sufrió un robo valorado en 11 millones de dólares. Él vivió varios episodios problemáticos y llegó a ser ingresado por un ataque de nervios en 2018.

+ Trump en el medio

La pareja, con cuatro hijos, seguían dando titulares, pero ya no tenían el control total de su fama, desgatada también por la admiración declarada entre Kanye West y Donald Trump

La crisis se ahondó cuando a mediados de 2020, el rapero presentó una surrealista candidatura a la presidencia de Estados Unidos, seguida por un episodio de comportamiento errático.

Tras conocerse el divorcio, por primera vez Kim pidió intimidad en Instagram, la misma plataforma en la que había explotado su relación. El día que se confirmó el divorcio, sus publicaciones se resumieron a publicitar su línea de ropa. Tocaba seguir con el negocio.

Tags relacionados