Muere en Miami el humorista Eddy Calderón, popular imitador de Fidel Castro
Fue llevado a un hospital debido a la presión alta y pudo comprobarse que había sufrido un derrame cerebral y estaba contagiado de Covid-19
El cantante, actor, presentador y humorista cubano Eddy Calderón, muy popular por sus imitaciones de Fidel Castro, Raphael, El Puma y otras personas famosas, falleció el pasado fin de semana en el hospital miamense donde estaba internado desde hacía meses.
"En julio de este año Calderón fue llevado a un hospital debido a la presión alta y pudo comprobarse que había sufrido un derrame cerebral y estaba contagiado de Covid-19", indicó Diario de Cuba, un medio digital de información para los cubanos de Miami.
Eduardo Ángel Calderón González, hijo de un exreo político cubano, nació hace 65 años en La Habana y llegó en 1979 a Miami, donde empezó trabajando en la construcción.
Su carrera artística se inició en la televisión en 1982 como invitado del programa de la compositora cubana Vilma Plana en Nueva York.
Su popularidad creció al imitar a personajes de la política y grandes interpretes de la canción.
Fue actor, comediante y conductor de programas de radio y televisión como "A noventa millas", "La barca de Calderón", "La timba de la mañana", y "Saweseando".
En "La mesa rotonda" hacía el papel de Fidel Castro, el lider de la revolución cubana.
Esa imitación le valió ser la voz en español en la película francesa "En la piel de Fidel Castro", de Karl Zéro y Daisy d'Errata, grabada en el 2009, con guión y asesoramiento de la escritora y poeta exiliada cubana Zoe Valdés.
El guionista de radio y televisión Ramón Fernández-Larrea dijo a Radio Martí que Calderón "encarnó como nadie el humor irreverente del cubano, que comienza por burlarse de uno mismo".
"Ha sido un super dotado de la imitación, que supo encarnar en la comedia personajes queridos y otros, tan odiados, que ayudaban a hacer catarsis, como su parodia del Fidel Castro disparatado y decrépito", dijo.
Fernández-Larrea recordó que Eddy Calderón se definía a sí mismo como una "gloria de Cuba y deshonra del exilio".