“Se busca”: "celebrities" que tuvieron problemas con la ley
A lo largo de los años, han sido varias las “celebrities” que han sido noticia por sus más y sus menos con la justicia. Ya sea por episodios derivados del consumo de alcohol o drogas, por actos violentos, por conductas incívicas o, incluso, por defender una buena causa, estos famosos han sumado una foto más a su álbum: la de la ficha policial.
BRITNEY SPEARS.
La princesa del pop, Britney Spears, conquistó las listas de éxitos poco antes del nuevo milenio. Unos años después, el consumo de ciertas sustancias, según diversos medios estadounidenses, comenzó a alterar la vida de la cantante y, en 2008, protagonizó un desafortunado episodio que acabó con la policía llamando a su puerta.
Spears fue detenida por la policía y custodiada hasta un hospital en el que evaluaron su situación, tras una discusión con su expareja a causa de la custodia de sus hijos.
Ese día, los agentes de Los Ángeles recibieron una llamada sobre las ocho de la tarde. Por lo visto, Spears se negaba a cumplir una orden judicial y no quería entregar a los niños a su padre. Los indicios apuntaban a que la cantante estaba bajo el efecto de alguna sustancia.
LINDSAY LOHAN .
Los problemas de Lindsay Lohan con la ley comenzaron, o al menos se hicieron públicos, a mediados de la década del año 2000.
En 2007, la actriz fue detenida por la policía por conducir bajo los efectos del alcohol. Los problemas con la justicia de la actriz han ido de la mano con sus problemas de adicción.
El año de su primer arresto, y dos semanas después de salir de rehabilitación, vuelve a ser arrestada. Fue acusada de conducir ebria, de posesión de sustancias estupefacientes y de conducir con el permiso suspendido.
La condenaros a una pena de cárcel, de la que solo cumplió 84 minutos y con diversos servicios a la comunidad.
Desde entonces, Lohan acumuló un rosario de visitas a los tribunales para constatar el cumplimiento de la libertad condicional, evaluaciones sobre su rehabilitación y controles de consumo de estupefacientes.
HUGH GRANT.
Hugh Grant, el actor británico rey de las comedias románticas, también tuvo sus más y sus menos con la Justicia.
Con cara de circunstancia, los hombros ligeramente encogidos, los brazos como si tuviera las manos en los bolsillos y con un polo a rayas. Así aparecía Grant en la foto de su ficha policial en la ciudad estadounidense de Los Ángeles.
Era 1995, el actor fue detenido en la ciudad californiana por tener relaciones sexuales en su coche con Divine Brown.
Ella era prostituta y él fue acusado de mantener una conducta lasciva en un lugar público.
Por este cargo se enfrentaba a una condena de seis meses de cárcel. Finalmente, se le impuso una multa de 1.000 dólares y acudir a un programa de educación sobre el VIH.
JANE FONDA
También es posible tener un problema con la policía sin hacer nada estrictamente malo o por motivos ciertamente loables, como en el caso de la actriz Jane Fonda.
El año pasado, la foto de Fonda, con un abrigo rojo y levantando los brazos, con unas esposas de bridas blancas alrededor de sus muñecas, dio la vuelta al mundo.
La actriz había sido arrestada por su participación en las protestas contra el cambio climático en la ciudad de Washington, la capital de EEUU.
Pero la rebeldía y el activismo de la actriz ya venía de lejos. En 1970, Fonda pasó una noche en la cárcel. En la foto de su ficha policial aparece con media melena y flequillo, una camiseta negra y el puño en alto. Fue en Cleveland y contra ella formularon cargos por contrabando de drogas que, al final se supo que eran falsos.
Lo que hizo que Fonda pasase una noche en los calabozos fue su activismo contra la Guerra de Vietnam. Después del arresto, un oficial dijo que la detención de Fonda era una orden que venía directamente del presidente Richard Nixon, de acuerdo con el diario Washington Post.
CHARLIE SHEEN .
El actor estadounidense Charlie Sheen ha tenido problemas con la ley en diversas ocasiones. A veces por sus adicciones, otras, por episodios de violencia.
Sus idas y venidas se remontan a la década de los noventa, cuando, por ejemplo, su entonces prometida recibió un disparo en un brazo. Finalmente se determinó que había sido un accidente y no se presentaron cargos.
Cinco años después, su nombre apareció en la lista de clientes en un juicio contra la madame Heidi Fleiss, a la que se acusaba de evasión de impuestos y proxenetismo.
Según un medio estadounidense, Sheen se había gastado más de 35.000 dólares en servicios de prostitución.
En 1997, la por aquel entonces novia del actor, lo denunció por agredirla y amenazarla y, el intérprete británico, fue condenado a un año de prisión. Suspendida por dos años de libertad condicional, exigencia de acudir a terapia y al abono de una multa.
En la primera década del siglo XXI, Sheen también tuvo sus más y sus menos con la justicia.
Por ejemplo, en 2009 el actor fue arrestado el día de Navidad por amenazar a su entonces esposa. En 2010, destrozó la habitación de un hotel y volvió a ser detenido.