Entretenimiento

Por Covid-19

Una película de desastre y terror para la producción dominicana de cine

Pachico TejadaSanto Domingo, RD

El mundo ha cambiado a causa del co­ronavirus y las últimas sema­nas en nuestro país se es­tán viviendo los estragos de esta crisis que ha afec­tado a todas las áreas de nuestra sociedad. Incluido también el cine, cuyo buen momento desde que la Ley entró en acción experimenta ahora su pri­mer revés.

Todos los rodajes están detenidos y los proyectores de las salas apagados, por lo que también los estrenos pautados para estas fechas han sido pospuestos. Al ser ordenada la cuarentena y el estado de emergencia, la Asociación Dominicana de Profesionales de la In­dustria del Cine (Adocine) pidió que sus integrantes sean tomados en cuenta por las acciones que el Es­tado ha previsto para ayu­dar a las personas que no reciben un sueldo fijo.

Esto fue mal interpreta­do, ya que, según recuerda Hans García, presidente de la entidad que agrupa a los trabajadores del cine, no se refería a los productores, directores o empresas que prestan servicios dentro de la Ley. “Más bien a ese per­sonal de última línea que trabaja por semanas o por día y que en esta situación la ve bien difícil”, ha dicho García a LISTÍN DIARIO.

Filmaciones detenidas

García ha sido, junto a otros cineastas locales, uno de los afectados directos de la de­licada situación sanitaria que vive la nación ya que tuvo que suspender el ro­daje de su segundo largo­metraje llamado “La otra lu­cha”, pautado para iniciar el pasado 19 de marzo. La película es un drama ubi­cado históricamente en los 12 años de Balaguer y cuen­ta con un equipo de 80 téc­nicos, más de 30 actores y 270 extras. “Nuestra expec­tativa es esperar que a fi­nales de mayo ya todo esté controlado y que podamos filmar en junio”, explica el cineasta, viendo ese como el escenario más alentador en un momento en el que ve lo afectado que estará la industria por las pocas pro­ducciones que se puedan hacer.

Otro rodaje que se ha visto interrumpido es el de “Carajita”, co-producción con Argentina y de la cual el cineasta Andrés Farías es asistente de dirección.

Una filmación, dirigi­da por que estaba tenien­do lugar en Las Terrenas y con la dirección de la ar­gentina Silvina Schnicer y el español Ulises Porra. Además de estos cineas­tas, en esta producción participan actores extran­ jeros que pudieron vol­ver a sus países antes de la cuarentena.

“Nunca había parado una película hasta la fecha y evidentemente me sigue afectando en cuanto to­dos los rodajes están dete­nidos y no sé cuando vol­veré a trabajar y por tanto producir dinero”, comenta Farías, a quien no solo por esto le ha hecho daño esta situación del Covid-19.

Farías ha tenido que pos­tergar el estreno de su pe­lícula “Candela”, la cual tenía planificado llevar a varios festivales interna­cionales que hoy han sido suspendidos. “La propia in­certidumbre seguirá, por quién sabe cuánto tiem­po, luego de que pase la pandemia. Me refiero a si la gente va a seguir yendo a las salas de cine pron­tamente o qué onda”, re­flexiona el realizador, quien tampoco sabe cuán­do la estrenará en cines.

Otro afectado, pero no en la suspensión de un ro­daje, es Francis Disla “El Indio”, quien está al fren­te de Imakonos Light and Grips, una empresa que al­quila equipos de filmación para películas y comercia­les. El director de filmes co­mo “El hoyo del Diablo” o “Dos policías en apuros” se preocupa porque este nue­vo orden de las cosas pue­da afectar la financiación de películas en el futuro.

“El cine dominicano está basado en la ley, que es las ganancias de las empresas. Es decir, si las empresas no presentan ganancia o po­ca, no podrán invertir”, considera Disla.

EN PARO

Crews. Los técnicos del cine lo­cal están en una situa­ción delicada, igual que muchos otros trabajado­res informales.

Tags relacionados