Música
El jazz es golpeado por el coronavirus
El jazz ha sufrido un duro revés con la pandemia que ha puesto al mundo patas arriba con la muerte de varios de sus importantes representantes. El legendario pianista Ellis Marsallis Jr, patriarca de una familia de instrumentistas de este género, es la más reciente víctima de este virus.
Antes que él fallecieron Wallace Roney, trompetista protegido de Miles Davis, y el saxofonista Manu Dibango, en una pandemia que no discrimina y ha afectado a muchas figuras del arte y el entretenimiento.
Marsallis, quien tenía 85 años, murió a causa de una neumonía provocada por el Covid-19 la noche de este miércoles. Nacido en Nueva Orleans, era en esa ciudad cuna del jazz la cabeza de un clan integrado por sus hijos: Wynton, trompetista, ícono del jazz norteamericano y que es director de jazz del Lincoln Center de Nueva York. Branford, saxofonista que lideró la banda musical de “The Tonight Show” y salió de gira con Sting. Delfeayo, trombonista, prominente productor musical y artista. Y Jason, percusionista, quien tiene su propia banda y acompaña a otros también.
El deceso de Wallace Roney, de 59 años, se debió a complicaciones causadas por el coronavirus el 31 de marzo en Nueva Jersey. Antes de su encuentro con Miles Davis, Roney recibió su educación en jazz de Clark Terry y Duke Ellington. Roney, quien nació en Filadelfia, inició su andar en la música a principio de la década 80 y fue miembro de Art Blakey y los Jazz Messenger y el Tony Williams Quintet.
Nacido en Camerún, Manu Dibango hizo aportes al jazz y al funk al fusionarlo con ritmos africanos y se convirtió en uno de los músicos más influyentes del mundo en música bailable, no pudo con el Covid-19. Su deceso ocurrió el pasado martes en París a la edad de 86 años. Su importancia inició en 1972 cuando adquirió fama internacional con su tema 1972 “Soul Makossa”, uno de los primeros indicios del World Music.