Despedida
Yóskar Sarante deja disco en producción
Bachatero. Yóskar Sarante descansa en el cementerio Jardín Memorial, donde fue despedido tras 49 años de vida.
Yóskar Sarante fue despedido el miércoles de la tierra con un legado en el que dejó decenas de bachatas que son populares y que ya son patrimonio musical. Además, le quedó pendiente una producción que no concluyó y de la que llegó a grabar seis temas.
De hecho, se grabaron temas con Secreto y Raulín Rodríguez, comentó Miguel Alcántara, mánager del bachatero, fallecido el pasado 28 de enero, a los 49 años de edad, en un hospital de Orlando, Florida.
La familia de Sarante estaba muy triste. Su pareja y esposa por 35 años, Clarissa Paulino, exclamaba a Dios para que la despertara de este momento de dolor.
“¡Ay, Dios!, dime que esto es mentira, que es un sueño”, expresaba desconsolada la esposa de Sarante, con quien procreó tres hijos.
El cuerpo del bachatero fue velado en la capilla Las Orquídeas del Cementerio Jardín Memorial, donde ayer fue sepultado.
Entre los artistas en presentarse a la capilla fueron el merenguero Pochy Familia, Fernando Villalona, Julián Oro Duro, Cheché Abreu y Kinito Méndez, así como los bachateros José Manuel Calderón, Luis Segura y Kiko Rodríguez. Estelares de la bachata no acudieron ni al funeral ni al entierro. Ya en la despedida final solo estuvieron amigos, familiares y seguidores.
Entre los que acudieron a la sepultura estaba José Luis Moreno “El Doble de Yoskar Sarante”, además del compositor Héctor Peña Pacheco, quien fue el compositor de temas como “Llora alma mía”, “Valió la pena”, “No tengo suerte en el amor”, “Llora un hombre”, “Ay amor”, y otras, según reportó el portal idominicanas.com.
Un militar que se identificó como hermano del cantante de bachatas agradeció por acompañar a los familiares “en la hora cero de Yoskar... “mi hermano vete con Dios, descansa en paz”, reseñó idominicanas.com.
Para el merenguero Pochy Familia, República Dominicana perdió a uno de los mejores intérpretes de la bachata, una persona que marcó un estilo no solo en la tarima, sino también en las grabaciones. fue una persona que dejó un legado para la sociedad dominicana”.
El intérprete de “Guitarra” y “Llora alma mía” se convirtió en uno de los cantantes de bachata más populares del país por su larga trayectoria y la cantidad de éxitos musicales grabados, sobre todo en los últimos 20 años.
Desde niño, “El Pequeño Gigante” tuvo inclinación a la música, de manera empírica.
A los doce años, cuando Pedrito Fernández cargaba “La mochila azul”, él era su fiel imitador. Su afición por la guitarra la heredó de su padre, que falleció cuando aun era niño. La familia vivía en Villas Agrícolas, barrio capitaleño donde nació el 2 de enero de 1970.
Sarante coqueteó con el merengue en sus años mozos, pero fue la bachata la que le dio sus amores más intensos en la música. A los 15 años se integró a una orquesta merenguera que le llamaban La Proclama, dirigida por Tomás Barreras y en la que también figuraba El Jeffrey.
Su primera luz musical en bachata fue “La Noche”, en el 2000, y fue en Baní donde se le ofreció su primer contrato.
Además de “Llora alma mía” y “La noche”, otras bachatas que lo catapultaron fueron “Cama separada”, “Guitarra”, “Perdido”, “Prohíbeme”, “Vale la pena”, “No te detengas”, “No tengo suerte en el amor” y muchas más.