Lo teórico del oficio del cine

Este año que concluye ha tenido varios puntos luminosos en el aspecto cinematográfico. Uno de ellos es que se han celebrado varias actividades que tienen como objetivo el debate, los razonamientos, la crítica y la valoración del quehacer cinematográfico en el país. Esto es un paso muy importante para que el desarrollo de la filmografía local sea saludable y que se encuentre un espacio en el que el público y los que hacen las películas expresen sus puntos de vista. En ese sentido, pudimos disfrutar y participar de la segunda edición del Congreso Nacional de Cine, celebrado en en el Centro de Convenciones del Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX). De igual manera, tuvimos el primer Simposio Internacional de Cine y Nuevos Medios Audiovisuales que tuvo lugar en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) organizado por la Escuela de Cine, Televisión y Fotografía de esta institución. A este se le unió el Foro Iberoamericano sobre Interpretaciones Audiovisuales, de Latin Artis, realizado por decimocuarta ocasión en el salón Aida Bonnelly de Díaz del Teatro Nacional. También hubo espacios más pequeños, como el ciclo de cine “Brecha”, de la mano del programa “Primera toma” en el espacio de Cinema Boreal en Mamey Café Librería en la que se proyectaron películas con intenciones artísticas como “El homrbe que cuida”, de Alejandro Andújar, “Cocote”, de Nelson Carlo de los Santos, y “Azul magia”, de Yoel Morales, además de cortometrajes de jóvenes realizadores. En los dos primeros hubo charlas, conferencias, ponencias y paneles de gente ligada a la producción de cine así como también de críticos y analistas de este arte en distintos medios, quienes debatieron distintos temas ligados a la industria desde distintos puntos. En el tercero, se realizaron cineforums en el que participaron los espectadores con directores y actores de los filmes proyectados. Estos son pasos importantes en una filmografía que va tomando forma y en la que el público tiene una importancia vital.