DECESO
Rasputín no pudo despedir otro “Viejo año”
July Mateo “Rasputín” no pudo despedir otro “Viejo año”. Su vida se apagó al mediodía del viernes a los 63 años, a causa de accidente cerebro vascular (ACV).
El más grande homenaje que pudo haber recibido el músico y merenguero fue partir en la época navideña.
“El Monje”, como también se apodaba, grabó uno de los merengues más emblemáticos de las navidades dominicanas.
Autoría del venezolano Manny Delgado, el tema “Viejo año” fue grabado por Rasputín en 1984, en versión merengue y, desde entonces se convirtió en un himno de despedida del año viejo. Con este tema la música de Rasputín quedó grabada por siempre como parte del catálogo dominicano musical navideño y, por supuesto, no dejará de bailarse en los jolgorios de la época en todo el país. En su larga carrera Rasputín dejó grabadas 86 canciones incluidas en nueve producciones discográficas.
Al momento de su deceso Rasputín se encontraba solo en su residencia, y su ausencia a un compromiso de trabajo esa noche alertó a los amigos que fueron a buscarlo, entre ellos el pianista Darys Contreras, quien dio a conocer la funesta noticia del deceso del destacado trompetista, la madrugada del pasado sábado.
En el 2012, el músico fue hospitalizado en cuidados intensivos, luego de subirle la presión arterial y los niveles de azúcar. Rasputín se recuperó satisfactoriamente y continuó con su vida laboral como trompetista y director musical de su agrupación merenguera.
Julio César Mateo Bautista era su nombre verdadero. Nació el 23 de septiembre de 1955, en la provincia Hato Mayor, al este del país, donde creció en una familia de nueve hermanos junto a sus padres Julio Mateo Jiménez y Clemencia Hilda Bautista.
Rasputín tuvo tres matrimonios y seis hijos: Julio César, Sahir, Rapsay, Alexandra, Juliana y Amaia.
Según registra el libro “Merengueros” del periodista Fausto Polanco, recibió sus primeras lecciones de música desde los 8 años, con el método Eslava, de la mano de su padre. A los 16 se unió a la orquesta de la Marina de Guerra, de Santo Domingo, en donde permaneció por cuatro años. Es durante esta época que recibe el apodo de Rasputín debido a que buscaba amistad con todos sus compañeros en La Marina.
Gracias a un músico de Johnny Ventura incursionó en la música popular. Antes de destacarse como trompetista estuvo cantando en el Night Club La Fuente y luego con su instrumento formó parte de Los hijos del Rey, Bonny Cepeda, Aníbal Bravo y Cheché Abreu. Luego permanece durante tres años en Curazao en donde dirigió la orquesta Casama, para luego regresar al país a tener una participación preponderante como trompetista en la agrupación de Wilfrido Vargas hasta 1984.
Su grupo
Es en 1983 que la disquera CBS le propone grabar una producción discográfica para promover el merengue en otras voces a escala internacional.
Según relata Polanco en su libro, es Dioni Fernández quien le anima a aceptar la propuesta que en principio fue hecha a Dioni pero por compromise no pudo aceptar el proyecto de CBS y, gracias a la pegada que tuvo primero en otros países, Rasputín se mantuvo ese año agotando largas giras de presentaciones.
Ese mismo año la disquera le propuso grabar un nuevo álbum y salió “Primavera”, en él incluía los temas “Te olvidé”, “Consejo” y “Viejo año” autoría del venezolano Manuel Delgado y cantado por Betulio Medina, de la agrupación Maracaibo 15. Rasputín lanzó el tema para la Navidad de 1984 y desde su salida no ha dejado de escucharse y bailarse en todas las fiestas de navidades en el país.
Dos años después El Monje del Merengue concluye su contrato con CBS y firma con Karen Records de Bienvenido Rodríguez, y de inmediato graba el álbum “Macumba”, que contiene los temas “Toda la vida” y “El ilegal”.
En 1988 grabó el LP “Tan enamorados” incluyendo los éxitos “Vamos a amanecer” y “No me quería”. Con esa producción July Mateo concluyó su contrato con Karen y deja de grabar más música.
Con sus propios recursos, en 1991, grabó su nueva producción “Huellas” y fue vendido a la disquera J&N Records, pero la poca promoción que brindó la compañía al disco le desanimó para volver a grabar. Esta empresa compra los derechos de Karen Recods y CBS y lanza el álbum “Éxitos de Rasputín”.
Según confesara Mateo, uno de sus sueños era ser parte de El Combo Show de Johnny Ventura, sin imaginar que para 1993 El Caballo se uniría a su orquesta por alrededor de tres años. En 1998 Rasputín grabó su última producción discográfica, y esta vez se atrevió con la balada “Una joya” la que hizo con sus propios recursos y definió como su mejor trabajo.
OPINIONES
ARTISTAS
WILFRIDO VARGAS
El merengue está de luto, la música dominicana llora la partida de uno de sus artistas. Un amigo, compañero de los grandes.
JOHNNY VENTURA
Rasputín emprendió hoy el viaje final. Nos deja recordando su talento, su fuerte temperamento y su fina profesionalidad.
FERNANDO VILLALONA
Mi querido Rasputín cariñosamente Ras, esto no será un adiós sino un hasta luego. Vuela muy alto y que Dios te acoja en su santo seno.
OLGA LARA
Nunca olvido su detalle de que, cuando entregábamos los dos sencillos, el siempre pasaba el mío primero, y elogiaba mi canción.
EDDY HERRERA
Levantarse y recibir la noticia del fallecimiento de Rasputín es muy triste. Grandioso artista, músico y merenguero dominicano.
JANDI VENTURA
Y pensar que hace apenas dos semanas estuviste brindándonos alegría y hoy siento tanta tristeza por tu partida, ironías de la vida. Me quedo con todos tus consejos.