Jane Fonda no ha perdido un ápice de su espíritu rebelde

La actriz y activista política estadounidense Jane Fonda demostró al recoger en Lyon el Premio Lumiére por su carrera cinematográfica que no ha perdido un ápice de su espíritu rebelde y reivindicativo al aprovechar para arremeter contra el presidente estadounidense, Donald Trump.

La protagonista de películas como "Barbarella" (1968) o "Mi pasado me condena" (1971) recibió el galardón de las manos del director francés Konstantinos Costa-Gavras en medio de la larga ovación que le dedicaron las tres mil personas que llenaron el anfiteatro del Centro de Congresos lionés.

Tras felicitar al Festival Lumiére por su décima edición, Jane Fonda se declaró "emocionada" por ser homenajeada "donde todo comenzó para el cine", en referencia a Lyon como cuna del cinematógrafo, y añadió que las dos cosas más importantes en la vida para ella son "el amor y la luz".

La actriz, de 81 años, que habla perfectamente francés al haber vivido en París cuando estuvo casada en los años 60 con el director galo Roger Vadim, sorprendió al auditorio al cantar a capella breves estrofas de dos canciones populares en francés.

La ceremonia que dirigió el responsable del festival, Thierry Frémaux, se convirtió en un alegato feminista. La actriz francesa Dominique Blanc leyó un texto de la legendaria intérprete francesa Simone Signoret de 1949 en el que denunciaba la discriminación de la mujer en la sociedad de entonces.

Frémaux también presentó extractos del documental "Women make films: a new road movie through cinema" sobre mujeres cineastas aún en curso de realización, al que Jane Fonda ha puesto la voz junto a la actriz Tilda Swinton.

Horas antes de recibir el premio, Fonda ofreció una charla en el teatro de Celestins en la que además de hablar de sus películas criticó duramente al actual presidente a Trump y la situación que viven las mujeres en el mundo.

"Lo único que puedo agradecerle a este señor es que por fin cientos de personas se dan cuenta de hasta qué punto la democracia está en peligro, hasta qué punto hay un racismo que no importa esconder", declaró.

"Estamos viviendo un momento importante, resultado del trabajo de las mujeres desde hace décadas. El patriarcado ha sido desestabilizado por las mujeres, los negros, de ahí que intente con Trump un regreso en tromba. El eslogan 'Make América Great again' (Haz que América sea grande otra vez) significa que hay que recuperar una América blanca dominante y poner a las mujeres en su sitio", añadió la actriz.

Jane Fonda sucede en el palmarés del Premio Lumiére que entrega este festival de cine clásico a Wong Kar-wai, Catherine Deneuve, Martin Scorsese, Pedro Almodóvar, Quentin Tarantino, Gérard Depardieu, Ken Loach, Milos Forman y Clint Eastwood.

El próximo domingo el público lionés le tiene reservado un último homenaje en la jornada de clausura, cuando la actriz presentará la proyección de una copia restaurada de "Las uvas de la ira", de Jonh Ford.

Se trata de la adaptación al cine de la novela de John Steinbeck que protagonizó su padre Henry fonda en 1940 cuando ella aún sólo tenía tres años.