Artista
Ricky Martin pide que no se baje la guardia ante la trata humana
El artista Ricky Martin denunció que la trata humana es un problema que sigue muy presente en su Puerto Rico natal y en todo el mundo, por lo que pidió que no se baje la guardia ante esta lacra que afecta a la práctica totalidad de los países.
El cantante puertorriqueño aprovechó la celebración en San Juan del evento "Libertad", que organiza la Fundación Ricky Martin, para señalar que la trata humana es algo que se presenta en distintas formas -prostitución, esclavitud, sometimiento- en muchos sitios que la gente ni imagina, como la isla que le vio nacer.
Martin indicó que la gala "Libertad" es una forma de recaudar fondos para luchar contra esa lacra social.
"Ahora, tras el huracán María, la trata humana es más vulnerable", resaltó el artista, cuya fundación ha trabajado sobre el terreno para llevar ayuda a los cientos de miles de puertorriqueños que perdieron sus hogares y todo lo que tenían con el paso del ciclón tropical el pasado mes de septiembre.
"La trata humana pasa todos los días, es un crimen organizado", insistió el cantante, para quien es importante "involucrar a los gobiernos en todos los sitios" para combatir el problema.
"Libertad" es la primera propuesta formal de recaudación de alcance global de la Fundación Ricky Martin, con el objetivo de dejar un legado de justicia social para dar continuidad a los proyectos educativos y comunitarios, que, desde hace casi 15 años realiza la organización.
La cita contó con la presencia de Ricky Martin, presidente de la fundación; el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, y su esposa, la primera dama, Beatriz Rosselló. Igualmente estuvieron presentes las alcaldesas de San Juan, Carmen Yulín Cruz, y de Loíza -localidad sede del centro de la fundación-, Julia Nazario.
La trata humana es el segundo crimen más lucrativo en el mundo y genera cerca de 150.000 millones de dólares anuales en beneficios, ( unos 123.000 millones de euros) según la información de que dispone la Fundación Ricky Martin.