PERSONAJES
Superhéroes recorren bulevar de Hollywood
El Capitán América tiene un fuerte acento británico, y de día es cineasta. Iron Man vive en un apartamento detrás del Teatro Dolby, en Hollywood, y al menos una de las alas de Batman está hecha de una cortina de ducha de Target.
Superman es de Ucrania, no del planeta Krypton, y no se sorprendan de ver a varios Hombres Araña y Gatubelas de distintas nacionalidades y razas.
Bienvenidos al mundo de los superhéroes del bulevar Hollywood, donde prácticamente todos los que hemos visto en historietas o películas están ocupados posando para tomarse fotos con turistas.
Si bien el Hollywood que vemos en películas es un lugar de glamur y celebridades hermosas, el grupo de superhéroes que hay en el bulevar Hollywood frecuentemente no pertenece a este mundo exclusivo. Muchos son personas que luchan por ganarse la vida mientras tratan de hacer su sueño realidad y alcanzar el estrellato.
"Es un lugar de diversidad, es un lugar de drama, es un lugar de ilusión, un lugar de sueños rotos", dijo Dan Iñigo, actor de 25 años que merodea por el bulevar vestido como el Hombre Araña.
Aunque él apenas sobrevive, Iñigo dice que aun así es un buen trabajo para un actor que trata de abrirse camino y necesita mantener su calendario abierto para poder ir a audiciones.
"Uno puede ponerse su traje y venir aquí cuando tenga que hacerlo", dijo. "Realmente es un trabajo perfecto si es que eres un artista".
Si es que uno quiere hacer buen dinero en el bulevar Hollywood, uno tiene que parecerse bastante al personaje, dijo Matthias Balke, quien invirtió 3.000 dólares en su traje y equipo de Batman.
Él no jala a los turistas ni les hace bromas para llamar su atención. En vez de eso, solo espera que ellos vengan con él.
“Mi manera de buscarlos es con la calidad de mi traje", dijo. "La gente lo ve y viene a pedirme una foto. Nunca me acerco a nadie".
Balke, quien es guionista, productor y actor, dice que las propinas van desde unas monedas hasta 100 dólares. Él acepta todo, notando que las monedas ocasionalmente le vienen bien: "Hasta Batman tiene que ir a la lavandería".
Los artistas callejeros que han estado en el bulevar por mucho tiempo dicen que el negocio era más lucrativo antes, hasta que la calle se llenó de muchos superhéroes. Lo que es peor, algunos de ellos lucen mugrosos, mientras que otros ahuyentan a los turistas al exigirles dinero de manera burda.
"Esto debería de ser hecho por personas con experiencia en actuación", dijo Balke. “Debe de ser como Disneyland”.