‘Mientras somos jóvenes’

La vida es una y no podemos determinarla, parece decirnos Noah Baumbach en este filme, “While You Are Young”, así como tampoco podemos volver atrás y tratar de ser lo que no fuimos. Baumbach, el autor de la estupenda “The Squid And The Whale”, que también incide sobre los problemas intrafamiliares de gente común y corriente, nos presenta ahora a Josh, documentalista, y a su esposa Cornelia.

Ambos pasan de los 40, ambos viven más o menos cómodamente, pero la tormenta asoma: sus amigos contemporáneos les frotan en las narices a sus hijos pequeños, y ambos sufren por no haberlos tenido, pero tampoco deciden tenerlos en el presente. Además, Josh está embarrado en el documental que está haciendo, no le encuentra salida, pero además tiene problemas de dinero y se niega tercamente a buscar la ayuda del padre de Cornelia, veterano documentalista triunfador.

Nada es fácil para ellos porque de nada vale ya arrepentirse por lo que no hicieron. Claro, puede decirse, como muy bien lo expresara hace poco Inés Aizpún, que en el mundo existe todo tipo de mujeres, que no todas tienen que ser madres abnegadas, que algunas quieren ser profesionales, otras combativas, etc. Pero el problema para Cornelia es llover sobre mojado: no puede dar marcha atrás.

Pero las cosas se complican cuando conocen a una pareja joven, Jamie y Darby, liberales, sin ataduras, sin estar casados, viviendo el momento; Jamie quiere hacer documentales también, y su frescura atrae a Josh, que, casi sin darse cuenta, comienza a imitar al joven, a vestir como él, a montar en bicicleta, a usar ropa de moda, sombreros de modaÖ quiere volver a ser joven sin percatarse de que anda por una senda que no se puede volver a recorrer. Cornelia también lo hace, baila “hip hop” con Darby, quiere salir con ella y su grupo, pero, con menos problemas encima que su marido, se percata de su error antes que Josh.

Muy interesante el planteamiento de Baumbach, cine intimista que no recurre a subterfugios de tipo alguno, que no precisa de trucos ni de efectos especiales, que es lo más cercano a la vida tal cual que casi todo lo que vemos en cine en la actualidad. No es una historia de final feliz, no es un cuento de triunfadores, en este relato lo único que triunfa, si a eso se le puede llamar de esa manera, es el hecho de que los personajes principales viven sus vidas comunes y corrientes y, al terminar, descubren su realidad, su verdad, y se dan cuenta de que tendrán que seguir adelante con lo que tienen y con lo que son.

Muy bien llevada la historia que, por supuesto, es del mismo Baumbach, y bien interpretada por Ben Stiller y Naomi Watts (Josh y Cornelia), y Adam Driver y Amanda Seyfried (Jamie y Darby), con un asomo importante del veteranísimo Charles Grodin.