HUMOR-ZITO
Vendedor
Fito, quiero que me digas si es cierto que estás perdiendo la memoria. –Sí, así es, Pepe. Pero es a propósito. –¿Cómo puede uno olvidar las cosas voluntariamente? Vendedor –Según una creencia china, cuando alguien muere el alma queda errante, hasta que llega a un sitio donde hay una ancianita en un puente, con una olla de sopa para el olvido. Las almas toman de esa sopa, cruzan el puente y luego reencarnan, tras haber olvidado absolutamente todo. Le dije a mi abuelita que me preparara una sopa para el olvido, y ella hizo una con muchos vegetales. Estoy olvidando las cosas malas, las mujeres peleonas, los cobradores… –Por cierto, Pepe, necesito que me pagues los cien pesos que me debes antes de que lo olvide.