“Megadiva”

SANTO DOMINGO.- Ahora sí podemos decir que nos atraparon entre tercera y “home”. Porque nos sorprendimos nosotros mismos disfrutando de este film, “Megadiva” (algo que será un muy profundo dolor para otros “creadores” mucho más “famosos”, mucho más “experimentados”).

Primero, porque la historia creada por Roberto Ángel Salcedo es interesante, en especial, durante su primera mitad, porque se hace evidente que a partir de entonces el avance del relato se torna algo más forzado, que ya no es tan fluido, pero sobre todo, tan creíble, verosímil, propio de ese particular grupo social en cuyo seno se albergan los personajes.

Eso porque mientras el personaje central, que es un perfecto nerd, lento como enamorado, a más de algo feucho y cojo, a lo que se agrega que no es más que vendedor en Plaza Lama, mientras le sigue el rastro a la hermosa chica que es de su misma condición socioeconómica (y más que harta de ello, que por eso hace lo que hace), que ella lo desprecie, que él insista embebido en sus sentimientos, que los amigos se percaten de que está haciendo el tonto y quieran ayudarle, todo eso funciona a las mil maravillas. Ya no es lo mismo cuando a la chica le han montado apartamento, tiene dinero para gastar, tiene todo lo que siempre anduvo buscando.

Porque, si ya tiene todo, ¿por qué preocuparse por andarle atrás al nerd poniendo en riesgo todo lo que tanto trabajo le ha costado conseguir? Sin embargo, a pesar de ello, la película sigue funcionando con certeza como lo que es todo el tiempo: una comedia de enredos: el nerd tras la hermosa, la hermosa con un novio rico, luego enredada con el amigo del novio, la novia “oficial” del primero amiga de universidad de la diva...

A veces se quiere “enredar” más de la cuenta. La secuencia de los amigos con sus chicas en el cine es posiblemente la peor de todo el film... Pero, si la historia tiene sus altas y bajas, la manera de llevarla a las imágenes, la edición de Jean Gabriel Guerra resultó más que interesante, sorprendente: no es un relato lineal, sino que se cuenta fragmentado por el dependiente de un colmado a sus clientes que beben cerveza, y los “gags” conseguidos con la continuidad de parlamentos entre lo que ellos dicen y lo que dicen los personajes del relato que cuenta el dependiente son más que buenos: hay una muy especial continuidad cinematográfica entre imágenes alternadas y diálogos que es de lo mejor que hemos visto en nuestra incipiente (y muy generalmente mediocre) cinematografía. Megadiva.- Dirección: Roberto Ángel Salcedo y Giancarlos Beras; Guión: R. Ángel Salcedo; Edición: Jean Gabriel Guerra; Musicalización: Amaury Sánchez; Intérpretes: Roberto Ángel Salcedo, Jessica Grau, Fausto Mata, Irving Alberti. Cuquín Victoria, Nurín Sanlley y José Ml. Rodríguez. Calificación: Aceptable