Mays, Clemente y Dodgers

En la campaña de béisbol de 1954-55 en Puerto Rico y posteriormente en la Serie del Caribe, los Cangrejeros de Santurce, campeones de ambos certámenes, exhibieron en sus jardines a un estelar de grandes ligas como Willie Mays en el bosque central y a un desconocido Roberto Clemente en el izquierdo.

Ambos posteriormente alcanzaron en sus dilatadas carreras en liga mayor ser exaltados al Salón de la Fama del béisbol y esa ocasión fue la única que defendieron una misma enseña, aunque detalles históricos indican que si unas puntuales decisiones hubiesen sido diferentes ellos hubieren vestido el uniforme de los entonces Dodgers de Brooklyn.

Aconteció que finalizada la temporada de 1949 de la liga Americana negra, el receptor Roy Campanella organizó un grupo de jugadores para hacer una gira por el sur de los Estados Unidos realizando juegos de exhibición contra equipos de la región. Cuando le tocó enfrentar a los Barones negros de Birmingham donde se desempeñaba Mays en el jardin central, palpó la manera como ese jovencito, de apenas 19 años, efectuaba su juego. Lo impactó un certero disparo que hizo al plato atrapando a Larry Doby en intento de anotar y muy impresionado, recomendó a su equipo, los Dodgers, que enviaran a alguien para que lo firmaran. 

Fue comisionado con esa finalidad Wid Matthews, destacado experto que había sido clave en la firma

de Jackie Robinson, pero este reportó que: “ese chico no puede batear la curva”, provocando que se descartara la idea de adquirir a Mays.

En el caso de Clemente, este había firmado con los Dodgers en febrero de 1954, tenía dos años de experiencia en la liga borinqueña y asignado a la sucursal triple A ubicada en Montreal; allá tuvo una discreta actuación en 87 juegos, usado mayormente como jardinero suplente. Dejado sin protección para el draft de la regla cinco de ese año, la situación fue aprovechada por los Piratas que lo reclamaron,

colocándolo a partir de 1955 en su bosque derecho, brillando como un súper estelar de la posición hasta el día de su trágica muerte.

Casos estos que son ejemplos de como decisiones rutinarias influyen en los resultados históricos.