La cita con la historia de Angel Padrón

Hasta el miércoles en la noche, Ángel Padrón era un desconocido en el mundo del béisbol. Incluso en su país natal. En su carrera en la liga venezolana, ha relevado más partidos que los que ha iniciado. Inició la temporada 2023-24 con los Tigres de Aragua, y luego de compilar un PCL de 11.37 en cuatro apariciones, fue negociado a los Tiburones.

Pero le llegó su momento terminando la fase clasificatoria de la Serie del Caribe. El miércoles en la mañana se enteró de que sería el abridor del partido de esa noche contra Nicaragua. Se suponía que fuera una salida de tres o cuatro entradas.

Cuando Padrón completó su faena, logró mucho más que eso. En una de las mejores aperturas en la historia del evento latinoamericano, el lanzador de 26 años necesitó apenas 88 lanzamientos para dejar sin hits ni carreras a Nicaragua, emulando la hazaña que sólo Thomas Fine había logrado en Series del Caribe, por allá por 1952 en Panamá.

Fine, lanzando para los Leones de La Habana, consiguió su no-hitter el 21 de febrero del citado año contra el Cervecería Caracas de Venezuela, ganando el partido 1-0. Fue el momento más trascendente de la carrera del lanzador texano, quien apenas lanzó 72.2 entradas en Grandes Ligas con un pobre PCL de 6.81.

Si hacemos un cálculo rápido, se jugaron unos 800 partidos entre la joya de Fine y la que protagonizó Padrón, quien además consiguió uno de los pocos juegos completos en el pasado reciente de estos eventos.

En una época en que resulta extraño ver un abridor rebasar el límite de cinco episodios, el venezolano consiguió apenas el cuarto partido de ruta completa en los últimos 22 años de Series del Caribe, uniéndose a Rodrigo López (2002 con México), Nelson Figueroa (2010 con los Leones del Escogido de República Dominicana) y al cubano Viciohandrys Odelín en 2014, lanzando con los Azucareros de Villa Clara.

Padrón enfrentó al mínimo de 27 bateadores, permitiendo sólo un corredor en su dominante presentación. El dominicano Raudy Read negoció transferencia abriendo el octavo, antes de ser rápidamente eliminado en un doble play.

El zurdo contó con la asistencia del jardinero central Ramón Flores, quien realizó un par de buenas jugadas para conservar el “no-no”.

En una serie sumamente exitosa que aún tiene emociones que ofrecer, no tenemos dudas de que Ángel Padrón tuvo la actuación que se recordará en el tiempo.