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¿Qué pasa con Sandy Alcántara?

La desdicha para el abridor de los Marlins está en apartados que no necesariamente controla a plenitud… y quizás extrañe los tiempos donde no existían restricciones para las formaciones especiales.

El cabecilla de la rotación de los Marlins presenta un inicio poco luminoso.Getty Images via AFP

La primera parte de la campaña de Sandy Alcántara simboliza todo menos lo deseado para un reinante ganador del premio Cy Young. La dificultad lo sigue arrastrando, por lo que tratar de ocultarlo sería llamarse a mentiras cuando registra una efectividad de 5.05.

Está claro que las cosas no están saliendo bien, pero no basta con esta conclusión sin identificar eso que le hace retroceder.

Ha tenido apartados con mucha similitud a la campaña anterior como evidenciamos en los enfrentamientos terminados en ponches, aunque no parece suficiente para hacerlo marchar por el camino de las estrellas. Posibles efectos colaterales de las nuevas reglas y hasta la mala suerte están intercediendo en perjuicio del dominicano.

Sí, actualmente ocupa el sexto peor promedio de carreras limpias para abridores calificados, más no podemos obviar el hecho de que tenga un vistoso pitcheo independiente de la defensa (FIP, por sus siglas en inglés) de 3.58.

El contraste que crean ambos casilleros puede revelar muchas cosas: tiene una mejor actuación que lo indicado por la efectividad, puede describir cómo le está afectando la defensiva y, además, la mayor parte del daño en contra suya se produce a causa de las pelotas en juego.

Alcántara mantiene la potencia de sus envíos con las bolas rápidas viajando en velocidades de 98 millas por hora, seguidamente de lanzamientos secundarios con actuaciones destacables como el slider que los contrarios batean para el microscópico .154 o el cambio que genera abanicados el 36 por ciento.

La desdicha para el abridor de los Marlins está en apartados que no necesariamente controla a plenitud… y quizás extrañe los tiempos donde no existían restricciones para las formaciones especiales.

Las novenas opuestas evidencian ciertas ventajas cuando concentran una cantidad considerable de bateadores zurdos contra Alcántara, por lo que tiene 121 duelos con hombres de esta mano en los que lo superan con un OPS de .705.

Conseguir aplastar los lanzamientos en calidad de sinker y cambio es la razón principal del buen desempeño de los zurdos contra Alcántara, especialmente cuando el tipo de bola bateada termina en línea o rodado (14 hits en 31 turnos).

Considerando que la defensa no puede concentrarse de un solo lado, los equipos visualizan huecos para hacerle daño al dominicano atacando pitcheos diseñados con el fin de rodar la pelota, aprovechando las equivocaciones en la ubicación.

Realizar envíos en las zonas correctas, en particular con las opciones secundarias, ha sido otro capítulo de retrocesos, al mismo tiempo en el que provoca mayores puntos estratégicos desde donde la ofensiva puede atacar.

Como justificación a la oración anterior, a continuación mostramos un gráfico en el cual ilustramos los números de Location+ en cada pitcheo del lanzallamas comparando las últimas dos campañas.

Location+, una medición elaborada por Eno Sarris que puede encontrarse en el sitio web Fangraphs, utiliza el conteo, tipo de lanzamiento y la capacidad de colocar la pelota en el lugar adecuado.

La lectura es simple: mientras las ubicaciones sufren descenso en cuanto a productividad, los opuestos aprovechan para alimentar la producción. Esto perjudica directamente al cambio de velocidad que está siendo bateado para .333, es decir, el pitcheo premium de su arsenal resulta inefectivo.

Y contrario a la zafra anterior, el nativo de Azua tiene que lidiar con vicisitudes luego que el partido se hace adulto. La mayor muestra de lucidez que había tenido obedecía al hecho de lanzar con profundidad, aunque cargando serios problemas con las vueltas de las alineaciones en esta ocasión.

Alcántara limita para .156 en la primera oportunidad que encara una novena, pero sufre un estrepitoso descalabro a partir de ahí con la ofensiva poseyendo .243 y .340 en el segundo como tercer chance, respectivamente.

La clave para los toleteros está en aprovechar el cúmulo de lanzamientos, registrando .312 luego que el derecho transita entre el pitcheo 51 y 75. Parte importante de la zafra anterior fue la producción que tuvo en dicha situación, en la cual limitó a los oponentes para .210.

Funciona de aliciente ver que mantiene las cifras de chocolates y velocidad, sin embargo, para revertir la embarazosa situación actual necesitará recuperar la localización de los envíos suplementarios en busca de mantenerse debajo en la zona y provocar los batazos inofensivos que le abrieron las puertas del éxito.