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“Nunca es tarde cuando la dicha es buena”: Un vistazo al inicio de temporada de Sonny Gray
En lo que está siendo su undécima temporada en Las Mayores, atraviesa un tórrido inicio mientras registra efectividad de 0.77 en el tramo de 35 episodios
El abridor de los Mellizos de Minnesota Sonny Gray en un partido ante los Guardianes de Cleveland
La frase en el título de este escrito fue antes empleada por la banda Reincidentes en su quinto álbum de estudio. Así podemos explicar que, a pesar del paso del tiempo, no deben existir obstáculos que nos impidan hacer cumplir las metas propuestas.
De la misma forma, encaja con lo que estamos viendo del lanzador Sonny Gray en la primera parte de este 2023. En lo que está siendo su undécima temporada en Las Mayores, atraviesa un tórrido inicio mientras registra efectividad de 0.77 en el tramo de 35 episodios.
El universo finalmente parece estar de su lado, quien había sufrido actuaciones accidentadas producto de la inconsistencia de los últimos años.
Gray emprendió su trayectoria como una verdadera promesa, una figura llena de juventud que para los Atléticos de Oakland sostuvo un paso arrollador entre el 2013 y 2016, limitando a la oposición en este tiempo a un promedio de bateo anémico (.236) y alcanzando su pico en 2015 cuando finalizó tercero en las votaciones al Cy Young de la Liga Americana.
Los siguientes dos años los pasó dividiendo tiempo entre los Atléticos y Yankees de Nueva York, aunque teniendo una participación desalentadora que lo condujo a registrar un alto porcentaje de carreras limpias de 4.15 mediante 292 entradas y dos tercios.
Para el 2019 había cambiado de ruta hacia la Liga Nacional, recibiendo la pelota por los Rojos de Cincinnati con quienes se acercó al renacimiento.
En el primer año con la organización de Ohio fue invitado a su segundo Juego de Estrellas, además de cargar con una sobresaliente actuación que lo llevó a una efectividad ajustada de 162, es decir, fue mejor en 62 % frente a la media de lanzadores.
Atravesó nuevamente una etapa de retrocesos en sus siguientes zafras con los Rojos, empezando con la recortada campaña del 2020 y extendiéndose al año siguiente en el que estuvo limitado por una distensión en la caja torácica y tensión en la ingle.
Aun así pudo saltar a la lomita con 37 aperturas, pero quedándose corto a juzgar por una efectividad de 4.05 pese a que sus oponentes estuvieron restringidos al promedio de .218.
Un nuevo encuentro con la vistosidad llegaría para el nativo de Tennessee de la mano de los Mellizos de Minnesota, para quienes en la campaña del 2022 tuvo 24 aperturas con el 24 por ciento de sus enfrentamientos terminados en ponches.
La mejor parte – y razón de esta crónica – ha sido el arranque evidenciado en el actual torneo, cuando el veterano de 33 años tan solo ha tolerado tres míseras carreras al tiempo de recetar 41 chocolates.
Este rendimiento le permite tener en sus columnas el crédito de cuatro victorias, mientras se beneficia del índice de 4.63 carreras de apoyo por cada nueve entradas.
El inicio de carrera fue uno reluciente para Gray, demostrando todo el potencial que le ha permitido estar por tanto tiempo en el máximo nivel a pesar de los tramos tambaleantes. Y sí, nunca será tarde cuando la dicha es buena basándonos en la confianza de lograr nuestros objetivos.